El AVE acerca Málaga a Valencia pero abre una vía de competencia turística

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"Acortamos distancias, acercamos personas". Con este mensaje vende el Ministerio de Fomento desde hace años las bondades de la alta velocidad ferroviaria, que desde hace casi tres años conoce bien Málaga tras la puesta en funcionamiento del AVE a Madrid y más recientemente de las conexiones directas a Barcelona. Hitos a los que se sumará desde el próximo 19 de diciembre un nuevo escenario geográfico: Valencia. Pero la apertura comercial de este ramal no solo permitirá rebajar significativamente el tiempo de recorrido entre las capitales malagueña y valenciana, entre la Costa del Sol y Levante, sino que abre una vía de competencia evidente en materia turística entre ambas urbes, en especial en lo relativo a cruceros.

En este sentido, el director general de Viajeros de Renfe, Enrique Urkijo, confirmó que la previsión de la compañía es impulsar en Valencia una acción semejante a la puesta en marcha hace algunos meses en Málaga, donde se suscribió un acuerdo con la naviera Royal Caribbean comprometiéndose a desplazar los turistas que llegasen a Madrid al puerto de Málaga en seis horas. Una senda más fácilmente explotable en el caso de Valencia, que en apenas unas semanas estará unida con el centro de la península en poco más de hora y media.

Por el momento, la distancia en esta materia entre ambas ciudades es clara, puesto que está previsto que el puerto valenciano pueda mover alrededor de 220.000 turistas a finales de 2010, frente a los 680.000 calculados en el caso de Málaga. A pesar de ello, el AVE valenciano genera un reto a superar, al que se suma el importante número de turistas madrileños que ha podido optar por el litoral malagueño en los últimos años y que podría cambiar al levante peninsular.

El nuevo ramal ferroviario posibilitará rebajar el tiempo de trayecto desde Málaga a Valencia de las seis horas y cinco minutos actuales a cuatro horas y quince minutos, una hora y cincuenta minutos menos. Un marco temporal que variará nuevamente en unos dos años, cuando el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) ejecute la obra necesaria para conectar de forma directa de los trenes AVE de Andalucía (Málaga y Sevilla) con la capital del Turia sin pasar previamente por Madrid. Esta actuación, que podría estar finalizada en 2012, abrirá la puerta a tiempos mucho más competitivos.

Urkijo confirmó que esta actuación se desarrollará aunque dijo desconocer los plazos que se manejan. "Es lógico que se haga", apuntó, al tiempo que señaló que la finalidad será semejante a la lograda con los enlaces directos desde Andalucía a Barcelona. Los datos manejados por Renfe indican un incremento del 18% de viajeros respecto a los servicios anteriores entre Málaga y la Ciudad Condal. Todo ello, según apuntó, abre además una vía a explotar para el "turismo de ciudad y de puente", es decir, de aquellos usuarios que disponen de dos o tres días y que buscan destinos con conexiones directas.

Más allá del enlace con Valencia, desde el 19 de diciembre, pasando eso sí por Madrid, cualquier ciudadano que quiera ir desde Málaga hasta, por ejemplo, Cuenca, podrá hacerlo en tres horas y media, frente a las cinco horas y media actuales. Si el destino elegido es Castellón, se pasa de las siete horas actuales a cinco horas y treinta y cinco minutos.

Aplicado a un ejemplo práctico, un tren que salga desde la estación María Zambrano a las 14:05 llegará a Atocha a las 16:55. Desde aquí, el tren partirá en dirección Valencia a las 17:40, estando prevista la llegada final a las 19:18. Es decir, que desde la salida de Málaga hasta la llegada a la ciudad del Turia, incluyendo parada, el reloj habrá corrido cinco horas y trece minutos. Unos tiempos competitivos si se comparan con el recorrido por carretera. Málaga-Valencia en coche supone unas seis horas y media, para una distancia de 650 kilómetros.

En cuanto a los precios, el trayecto a Valencia podría salir, en el supuesto más económico, por casi 67 euros. A desglosar en los 34,55 euros de tarifa web desde Málaga a Madrid y los 31,9 euros de Madrid a Valencia.

Pero hasta el día en que los valencianos puedan disfrutar plenamente de la línea, que les permitirá ir a Madrid en una hora y treinta y cinco minutos (frente a las tres horas y veinticinco minutos actuales) los trenes siguen rodando por la vía a modo de pruebas. Un material móvil, por cierto, con firma malagueña, ya que ha sido fabricado en el taller de Los Prados. El modelo que hará el nuevo recorrido es el 112, también conocido como Pato.

Los datos aportados por Renfe muestran claramente que la mayor parte de los viajes que absorberá el nuevo recorrido Madrid-Valencia serán por negocio, en el 68% de los casos, mientras el 32% restante lo hará por ocio. Unos datos muy semejantes al perfil de pasajero que utiliza tren de Alta Velocidad para desplazarse desde la capital de España hasta la Costa del Sol. Todo ello redundará, según Renfe, en una mayor productividad, que se traducirá en la liberación de 21 millones de horas anuales, lo que en términos económicos se contabiliza en 408 millones de euros.