Aena obligará a los pasajeros a pasar por la tienda 'Duty Free'

El nuevo diseño de los espacios comerciales del aeropuerto de Málaga-Costa del Sol incluirá una gran tienda Duty Free que será de paso obligado para los pasajeros tras sortear el control de seguridad. El concepto es el de un espacio comercial "pasante", con grandes pasillos que conducirán hasta la zona de ocio, que será remodelada por completo, incrementado el espacio destinado a comercios y restauración. Será en 2014 cuando esta nueva imagen esté terminada, con una inversión por parte de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (Aena) de unos 4 millones de euros y 6 millones a cargo de Aldeasa, la empresa que gestiona los Duty Free. El resto, hasta los 12 millones que costarán las obras, irán a cargo de los concesionarios.

La zona que se abre detrás del control acceso de pasajeros de la Terminal 3 cambiará por completo su distribución, con el objetivo de que la "oferta sea más accesible y se amplíe la variedad de marcas y productos", explicó ayer el director de Espacios y Servicios Comerciales de Aena, José Manuel Fernández Bosch, que añadió que la remodelación va encaminad a "mejorar la experiencia del pasajero, para que se lleve una mejor impresión cuando llega y cuando se va", así como a hacer "mas rentable y productiva la zona comercial". La superficie comercial se verá incrementada en un 20%, "adaptándonos a todos los segmentos de pasajeros", concretó.

Además de la redistribución de Duty Free y el incremento de su superficie, lo que la llevará a aumentar sus ventas en un 30%, Fernández anunció que el espacio central de la plaza comercial que resultará de la redistribución y a la que conducirán los "grandes pasillos" de la tienda de Aldeasa, estará ocupado por un restaurante "gourmet" de un chef con dos estrellas Michelin. Por lo que, aunque no quiso avanzar nada, todo indica que será el chef Dani García el que se haga con este espacio, ya que La Moraga, de la que se desvinculó hace tiempo, desaparecerá de la entrada. Esta actuación entra dentro de la apuesta por mejorar la restauración, en la que se incluye la reubicación de Burger King en la entreplanta, a la que se accederá con una escalera mecánica desde la zona de restaurantes.

Ofrecer marcas de lujo será otro de los cambios que se introduzcan, enfocado a los viajeros con una mayor capacidad adquisitiva. En estos momentos Aena ya prepara el concurso de participación para estos espacios de moda, complementos y joyas, con la vista puesta en el flujo de pasajeros rusos, que en los próximos meses podría incrementarse de concretarse los acuerdos que se plantean para atraer a Málaga nuevas aerolíneas procedentes de Rusia.

Las obras de remodelación de la zona comenzarán en el mes de abril y la primera de las actuaciones será "redirigir el flujo de pasajeros hacia la tienda pasante", aseguró Fernández, pasando en el mes de octubre a una segunda fase que se alargará hasta marzo de 2014, que será cuando estarán completas las obras en la plaza central comercial del aeropuerto. Una vez finalizadas, la explotación del espacio comercial supondrá la creación de un centenar de nuevos puestos de trabajo, unos 40 de ellos vinculados a Duty Free.

De la terminal de salidas del aeropuerto, a la que tiene acceso cualquier ciudadano, sin necesidad de disponer de billete de avión, además de desaparecer La Moraga, lo hará el llamado Whopper Bar, cerrado desde hace tiempo. Por lo que la oferta de ocio de esta zona queda restringida a unas cuantas cafeterías y una tienda de recuerdos. A este respecto, el director de Espacios y Servicios Comerciales de Aena insistió en que el aeropuerto de Málaga no está asimilado como un espacio de ocio, algo que sí ocurre en otros, por lo que no se apuesta por potenciar estas zonas.