La madre de Alexa pide una ley estatal "que recoja los derechos de estos menores"

El caso ha corrido como la pólvora en los últimos tres días. Televisiones y radios se han hecho eco de la historia de Alexa, una chica transexual de 13 años que en un mes estará obligada a tener su DNI con un nombre que no corresponde a su identidad de género. Tras la sentencia desfavorable de una jueza al permiso pedido por sus padres para usar en el documento oficial el nombre con el que lleva viviendo desde su infancia, la familia se encuentra en una situación más que difícil. La repercusión mediática de la noticia que adelantaba el lunes este periódico no ha provocado la solución al problema pero, al menos, "hemos conseguido visibilidad, porque lo que no se ve no existe ni tiene derechos y queremos que la sociedad sepa que existen los menores transexuales y que tienen este tipo de problemas", dice Ches Cordero, la madre de Alexa. Para esta técnico en Empresa y Actividades Turísticas lo que necesitan es "una ley estatal que deje constancia de la existencia de estos menores y recoja sus derechos".

En España se han aprobado unos 30 cambios de nombres de menores pero en ningún DNI aparece un género distinto al que marcan los genitales de estos niños. Para eso hay que esperar a la mayoría de edad. Por eso, Ches Cordero considera que "nos estamos conformando con migajas, solamente con cambiar el nombre, y lo que queremos es exigir que sea un derecho recogido en una ley estatal y que se haga ya". De esta forma, otros niños como su hija no tendrían que pasar por una justificación permanente que vulnera su intimidad y dignidad como persona mientras alcanzan la mayoría de edad. "Hasta los 18 años no existen legalmente pero una persona transexual no se hace con su mayoría de edad, sino que nace transexual", subraya Ches Cordero.

La madre de Alexa argumenta que "a la séptima u octava semana de gestación aparecen los genitales y éstos liberan unas hormonas que tienen que llegar al cerebro y masculinizarlo, no sabemos por qué pero este paso no se produce y conlleva que tengan una genitalidad diferente pero su cerebro siga siendo femenino". Cordero agrega que hay estudios que sostienen que el cerebro del hombre y el de la mujer son distintos en tamaño, peso y morfología y que se han hecho autopsias a chicas trans y tienen el cerebro como el de una mujer, lo que demuestra que los cerebros son sexuados".

Por ello, esta madre demanda la necesidad de "un reconocimiento como persona cuando nacen" ya que el género "se forja entre los 2 y los 5 años, está en el cerebro no en la entrepierna, es el niño el que dice lo que es y esto es lo que hay que respetar", eso sí, sostiene, "con un respaldo jurídico". También apunta Ches Cordero que las personas transexuales han existido a lo largo de la historia pero "pero siempre se les ha tapado la boca" cuando lo que piden es un derecho "que no le hace daño a nadie". "Es maravillosa la diversidad, para mucha gente puede resultar abrumadora, pero solo es cuestión de respetarla", agrega esta madre luchadora que, junto a su marido, no se piensa cruzar de brazos.

El recurso que presentaron puede tardar hasta dos años en ser contestado, asegura, pero mientras tanto "no nos vamos a quedar quietos". Aún restan, como señala, "demasiadas cosas por hacer" en una sociedad que aún tiene que aprender mucho sobre tolerancia.