Málaga

Circuito de cross, pistas deportivas, una zona fitness...: Luz verde al parque del Campamento Benítez de Málaga

  • La Junta de Andalucía aprueba el anteproyecto al Ayuntamiento para construir un gran espacio recreativo en 28 hectáreas

  • El proyecto tiene una inversión estimada de 4,7 millones de euros y las obras comenzarían en 2023

El Campamento Benítez.

El Campamento Benítez. / Javier Albiñana (Málaga)

El Campamento Benítez vuelve a tener luz verde. Después de años en el limbo administrativo, la Junta de Andalucía ha dado luz verde al Ayuntamiento de Málaga para las obras que transformen la parcela en un gran parque de 28 hectáreas junto a Plaza Mayor y en la frontera con Torremolinos. 

El proyecto llevaba años parados por discrepancias entre ambas instituciones acerca del desdoblamiento del arroyo El Cañuelo y que parte de la finca se encuentra en una situación de vulnerabilidad en materia de inundabilidad a 500 años

En la resolución emitida por la Junta de Andalucía concluye que las actuaciones del anteproyectos son favorables ya que se consideran "los usos establecidos y las obras proyectadas en el mismo compatibles con la zona inundable en el cauce, ya que estas no representarían un aumento de la vulnerabilidad de la seguridad de las personas o los bienes frente a avenidas". Una vez solucionadas las discrepancias, las obras podrían comenzar en 2023.

Sin embargo, de cara a la redacción del proyecto, la Junta exige al Consistorio que sea remitido a la Administración Hidraúlica Andaluza. Además, condiciona el inicio de las obras a cinco puntos que deben cumplir en la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU). 

El primero de ellos es una declaración responsable por parte de la GMU en la que "exprese claramente que conoce y asume el riesgo existente y las medidas de protección civil aplicables al caso". Además, deberá presentar una copia del proyecto de detalle constructivo de la obra, con el fin de que la Junta tenga conocimiento del mismo. 

Por otra parte, deberá encargarse del mantenimiento y la limpieza de la parcela, haciendo hincapié en que ninguna de las obras suponga "un impedimento de la capacidad de desagüe del cauce ni de sus zonas de servidumbre". A esto, en los viales incluidos en la Zona inundable en un periodo de retorno de 500 años deberá señalizar que se trata de una zona inundable, "asegurando la no circulación peatonal o de vehículo de motor por los mismos cuando sean pronosticados episodios de intensas lluvias". 

El cuarto punto exime de toda responsabilidad a la Administración Hidráulica Andaluza de los daños en las instalaciones, siendo la GMU la responsable de "tomar las medidas de seguridad necesarias frente a inundaciones". 

Por último, se deberá comunicar el inicio y el final de las obras a la Junta de Andalucía para que sean inspeccionadas por personal de la Administración Hidráulica.

La historia de este emplazamiento, estratégicamente localizado en la frontera con Torremolinos, se remonta a hace 96 años, cuando el Pleno de la ciudad acordó la cesión de la parcela al entonces Ministerio de la Guerra para el asentamiento de las tropas de África. A pesar de que el citado compromiso fijaba una cláusula de reversión gratuita, la realidad es que el Consistorio no pudo tomar posesión de la finca hasta hace ahora nueve años. 

La intervención programada debe dotar al parque de un circuito de cross; de cuatro grandes plazas de estancia (con pérgolas para garantizar la sombra), que sumarán más de 6.500 metros cuadrados; pistas deportivas multiusos, así como una pista de voley playa y zona de fitness. Asimismo, se dibujan dos grandes zonas de juegos infantiles, de 2.000 y 1.000 metros cuadrados, respectivamente.

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