Arena, agua y sal son los materiales para las esculturas más efímeras
En la playa podemos encontrar castillos, animales o figuras humanas · Los 'artistas de la arena' aseguran que con lo que ganan pueden vivir y viajar · Emplean varios días para finalizar una creación
Caminando por el paseo marítimo de La Carihuela no es extraño encontrar grupos de niños mirando con expectación hacia la playa. Delante de ellos puede haber un gran cocodrilo. Ahora bien, no se trata de un cocodrilo cualquiera sino de una enorme escultura de arena. En él, unos limones hacen las veces de ojos, las pezuñas son mejillones y los colmillos pequeñas conchas de mar. El spray colorea su piel en tonos verdes y negros dando una verdadera autenticidad a la figura del reptil. "Para hacer este tipo de trabajo se requiere mucha imaginación", explica su autor.
Saúl Rodríguez es mexicano, lleva un año y medio haciendo esculturas de arena en la playa de La Carihuela. Como él cerca de media docena de artistas se instalan a lo largo del paseo de Torremolinos para hacer espectaculares figuras con tan sólo un poco de agua y arena. "Me guío por los esqueletos y las dimensiones, el resto lo hace la imaginación", argumenta.
Una vez trazado el diseño emplean diferentes herramientas para ir perfeccionando el dibujo: brochas, espátulas y diferentes tipos de pinceles. Después de dar forma a la escultura tienen que fijarla para que la arena no se deslice y rompa la figura, para ello, "utilizo el agua de mar que al tener sal ayuda a asentar la arena. Con un pulverizador le echo agua cada hora y así consigo mantenerla intacta".
Desde el tradicional castillo, pasando por las tortugas, cocodrilos, pulpos o figuras humanas. Todo se puede conseguir con un poco de ingenio. Estas esculturas pueden tardar en construirse entre diez horas y tres días en función de sus proporciones, no obstante, "cada semana hago una nueva a no ser que ocurra como hoy y me las encuentre destrozadas. Ayer la terminé y ahora tengo que volver a empezar". Este es uno de los principales problemas para los escultores ya que "por la tarde están los niños, por las noches los borrachos y el resto del día la Policía que no nos deja trabajar", reprocha Saúl.
A unos 300 metros de allí encontramos a otro "escultor", se llama Kamil y procede de la República Checa. Ha venido a España recorriendo toda la costa andando desde Francia. Vive gracias a sus esculturas y asegura que lo que gana con ellas le permite mantenerse y poder viajar. Su próximo destino es Marruecos, "allí la vida es más barata", afirma sonriendo. Este restaurador de iglesias, lleva tan sólo tres meses en Málaga, y dice que para él "esto es algo nuevo. Antes había trabajado con esculturas utilizando otros materiales pero nunca con arena". En ocasiones, se reúne con otros compañeros para hablar de sus dibujos. El objetivo es que éstos no se repitan, "buscamos que sea original y que no se vean siempre las mismas cosas", añadió. Kamil prepara ahora un símbolo belga, quizás para llamar la atención sobre los turistas de esa nacionalidad que se alojan en los hoteles cercanos. Turistas que se convierten, de hecho, en la principal fuente de financiación de estos "artistas de la arena".
Algunos de ellos ya se dedicaban a la escultura con anterioridad como ocurre con Kamil. Otros aprendieron el oficio de manos de profesionales ya en España como es el caso de Saúl. Muchos dicen que son artistas, ellos, sin embargo, no piensan lo mismo, "la gente siempre dice que somos artistas y se lo agradezco pero para mí ser artista es otra cosa. Yo sólo tengo talento", apuntó Saúl.
En las horas de más sol la actividad se para, "hace mucho calor y es difícil trabajar porque la arena está dura y menos manejable". Cuando empieza a atardecer se ponen manos a la obra. Es necesario aligerar el trabajo para que al dar las nueve esté todo listo.
Es la hora en la que muchos turistas van a la playa a cenar a las marisquerías, a tomar unas copas en los chiringuitos o a dar un paseo y el momento idóneo para ver estas esculturas terminadas y los escultores pueden ver su trabajo recompensado.
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