El Ayuntamiento de Málaga mantiene la esperanza de que el proyecto de transformación de los suelos portuarios de Muelle Heredia pueda finalmente someterse a revisión. Y, en este sentido, incrementarse el techo edificable actualmente autorizado a hasta cerca de 50.000 metros. La defensa que el Consistorio hace de esta variación no es nueva, ya que fue el propio alcalde, Francisco de la Torre, el que hace ahora diez meses puso sobre la mesa la necesidad de repensar esta operación urbanística.

El deseo del Consistorio choca ahora con la pretensión de la Autoridad Portuaria de impulsar cuanto antes el concurso para adjudicar a un inversor privado la construcción y explotación del complejo de oficinas y usos comerciales contemplados sin cambiar los parámetros marcados en el Plan Especial del Puerto desde hace décadas.

Este fue el mensaje que le trasladó el pasado lunes el presidente del Puerto, Carlos Rubio, al regidor en un encuentro en el que ambos mandatarios hicieron un repaso amplio de los asuntos pendientes. De entre ellos destacó Muelle Heredia. En especial porque el planteamiento portuario altera el consenso que las dos instituciones parecían haber alcanzado meses atrás, abriendo la puerta a alterar el plan del puerto con el objetivo de elevar a unos 50.000 metros el techo edificable del sector, frente a los algo menos de 27.000 actualmente asignados.

Por lo que parece, el principal temor de Rubio es que el necesario ajuste urbanístico se demore en el tiempo varios años, afectando a las posibilidades de desarrollo de los terrenos. No obstante, deja la puerta entreabierta a un nuevo cambio de postura si se constata la posibilidad jurídica de impulsar el concurso de Muelle Heredia condicionado al cambio del planeamiento.

Una propuesta demandada por el propio Ayuntamiento, en el intento de que no se abandone de manera definitiva el modelo analizado para este espacio. "Siempre es bueno buscar alterativas", defendía ayer el concejal de Ordenación del Territorio, Raúl López, quien arguyó que un aumento "moderado" de la edificabilidad (se llegó a analizar una alternativa que elevaba a 150.000 metros el techo) supondría "un mayor aprovechamiento de ese espacio, una mayor integración puerto-ciudad, una pequeña expansión de la zona soho en un espacio muy interesante".

López consideró que la alternativa en la que se viene trabajando desde hace meses, con sendos encargos al arquitecto Ángel Asenjo, era "interesante", si bien incidió en la necesidad de que las propuestas arquitectónicas "respondiesen a la demanda ciudadana". A su juicio, aumentar el techo permitiría que la futura licitación tuviese "mayor éxito", con un mayor retorno para el inversor, pudiendo con ello motivar a inversores de "más capacidad". Sobre ello, recordó que muchos de los grupos interesados en suelos para oficinas en la capital de la Costa del Sol destacan las bondades de los terrenos de Muelle Heredia y de Tabacalera. "Son los dos espacios estrella", dijo a modo de ejemplo.