El Ayuntamiento exige el derribo urgente del colegio San Rafael

La concejal del distrito, Teresa Porras, dice que el centro "es obsoleto" y está en un estado "deplorable" · Los padres se manifestaron ayer por "un centro digno"

Protesta de los padres, ayer, a las puertas del colegio San Rafael.
Protesta de los padres, ayer, a las puertas del colegio San Rafael.
Nacho Sánchez / Málaga

20 de marzo 2009 - 01:00

El Ayuntamiento de Málaga se ha sumado a las reivindicaciones de los padres del colegio San Rafael. La concejal del distrito, Teresa Porras, exigió ayer a la Junta de Andalucía la demolición del centro escolar "ante el estado obsoleto en el que se encuentra". Humedades en las paredes, carcoma en las puertas o amianto en la cubierta son sólo algunos de los problemas que el Consistorio ha detectado, por eso la responsable municipal solicita "la creación de un nuevo colegio para esta barriada".

La petición municipal se produce el mismo día en el que los padres de los alumnos del colegio de Camino San Rafael se manifestaron ayer a las puertas del colegio para exigir "un colegio digno". La principal queja se centra en uno de los dos edificios que componen el centro, al que ellos denominan "aula prefabricada", pero que según la Delegación de Educación es un "módulo preindustrial" y que alberga a un centenar de niños de entre 3 y 5 años. Se construyó hace ya más de tres décadas y, según cuentan, se hizo con carácter temporal para un periodo de cinco años. "Y aún continúa, con un estado ya lamentable y que no es digno para estos pequeños", según contó Francisca Expósito, de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) del centro educativo.

Aseguran que la Junta les ha prometido remodelar el colegio, algo que en Educación confirmaron el miércoles, donde explicaron que las mejoras en el interior y en la cubierta se realizarían en verano para no afectar al transcurso de las clases y recordaron que el mantenimiento es responsabilidad municipal. Ayer el Ayuntamiento aseguró haber realizado varios trabajos que no sirven de nada "ante las grandes deficiencias del centro", según Porras, que afirmó tener una partida de 55.000 euros para mantener el colegio y criticó a la Junta: "es una barbaridad mantener la actividad en el colegio el próximo curso".

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