"Los ciudadanos no pueden ser rehenes de la negociación” sobre el Brexit y “no pueden ser utilizados para mejorar posiciones negociadoras”, advirtió ayer el ministro español de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, Josep Borrell, que señala que “España lo tiene muy claro”. “Los derechos de los ciudadanos, tanto de los británicos en España como de los residentes europeos en Reino Unido, son una cuestión fundamental de la negociación del Brexit y algo a lo que todos nos hemos comprometido a resolver de la mejor manera para la gente”, ha añadido a los periodistas.

Ante el secretario general de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE), Thomas Greminger, y en la rueda de prensa de cierre de la Conferencia Mediterránea de esa organización, celebrada en Málaga, lanzó un mensaje de “tranquilidad” dirigido a los británicos residentes en España sobre el Brexit. “No afectará a nuestras relaciones económicas con ellos”, aseguró Borrell en referencia a los residentes británicos, aprovechando su presencia en la Costa del Sol, donde habitan buen número de ellos, ante su preocupación por la cuestión.

Destacó que la negociación no está acabada, que aún hay tiempo y que “el Gobierno español tendrá siempre muy presente las condiciones resultantes del acuerdo para las condiciones de vida de centenares de miles de británicos que viven en España y las decenas de miles de españoles que viven en Reino Unido”.

La conferencia reunió a más de 170 participantes, contando con la asistencia de cerca de una quincena de ministros y viceministros de los estados participantes de la OSCE y sus socios de Cooperación de la región mediterránea –Argelia, Egipto, Israel, Jordania, Marruecos y Túnez–.

El ministro de Exteriores lanza un mensaje de tranquilidad a los residentes británicos

Borrell, como anfitrión de la conferencia, recibió a los participantes y realizó una intervención en la que destacó la importancia del Partenariado Mediterráneo en el ámbito OSCE, recordando que ya en el Acta Final de Helsinki de 1975 se reconoció que la seguridad de la región estaba unida a la seguridad en el Mediterráneo.

Ha destacado que la celebración de esta conferencia en Málaga es “un reconocimiento del liderazgo de España en la OSCE, que es fundamental para contribuir a la estabilidad dentro del espacio político europeo ampliado”. Fue la presidencia eslovaca del Grupo de Contacto Mediterráneo de la OSCE la que le ofreció acoger esta conferencia, lo que fue apoyado de manera unánime por la organización el pasado mes de julio.