El 70% de los centros sanitarios de la provincia de Málaga tienen amianto, un mineral altamente cancerígeno cuyo uso está prohibido por ley desde 2001 pero que fue muy utilizado en las décadas de los 70 y 80. Así lo ha denunciado esta mañana el sindicato CCOO en Málaga, que pide al nuevo gobierno regional un plan para eliminar el amianto que se encuentre degradado -la amplia mayoría- en todos los centros de salud y hospitales públicos de Andalucía que lo posean antes de 2024, siguiendo el plan iniciado en los colegios públicos que tiene previsto erradicar ese material en 2022. 

Rafael González, responsable de la sección de Salud del CCOO en Málaga, ha explicado que hay amianto en el Hospital Civil, en el Regional, en el Marítimo y en Barbarela, así como en los centros de salud que fueran construidos antes de los años 90. "El 70% de los centros sanitarios tienen amianto en alguna proporción", ha afirmado González, quien ve menos probable que haya en el Clínico y el Materno y descartó su existencia en hospitales más nuevos como los de Antequera, Ronda o Costa del Sol.

Por ahora, solo se ha empezado a actuar en el Hospital Civil después de que en febrero del año pasado este sindicato recibiera quejas por parte de los empleados. "Hablamos con la gerencia y se contrató a una empresa para que se eliminara el amianto", ha comentado González. En el resto de espacios no se ha hecho nada.

"Proponemos a la Junta el uso de fondos estructurales de la Unión Europea para que se haga un proyecto de envergadura, es decir, que se elimine el amianto de todos los centros sanitarios de Andalucía y no que tengamos que ir negociando uno por uno", ha subrayado el dirigente de CCOO, que ha marcado como fecha de finalización de ese plan el año 2024.

En la misma línea, Rosa Martín, responsable de sanidad de CCOO en Andalucía, ha recordado que "el amianto es considerado uno de los productos más cancerígenos desde 1977 y hay que quitarlo de forma segura porque no tiene sentido ir a un hospital a mejorar y que te puedas poner peor". Martín ha recalcado que "nos vamos a reunir con los nuevos directivos de Salud de la Junta y le vamos a pedir que se pongan a trabajar porque si no nos van a tener en frente con bastantes medidas de presión". 

Francisco Puche, asesor de CCOO en esta materia, ha afirmado que "más del 80% del amianto instalado ya ha pasado su vida útil, que se estima en unos 35 años" y ha precisado que la inhalación de sus microfibras puede producir cáncer de pulmón. "Desde que estás con el amianto hasta que tienes cáncer de pleura pueden pasar 40 años y por eso no se le hizo caso, pero ahora están muriendo personas por ese motivo que estuvo expuesta al amianto en los años 70 y 80", ha narrado. 

Un vertedero de uralitas con amianto

Puche comentó que el amianto -que ya está totalmente prohibido- se instaló en más de 3.000 tipos de productos, desde tostadoras hasta planchas o trenes, porque es un material aislante, ignífugo y de poco peso.  En este sentido, ha asegurado que, por ejemplo, hay 40.000 kilómetros de tuberías de agua potable en España hechas con este material y que ya hay ayuntamientos como el de Sedella en Málaga que las están cambiando. 

"Se sabe cómo resolver el problema y cómo tratar el amianto para que sea seguro. Lo que falta es presionar para que se haga de forma conjunta en todos los sectores", ha añadido este experto, quien indica que el coste no es demasiado elevado. "La probabilidad de coger la enfermedad es baja, pero existe. Y hay solución si se retira y se controla en condiciones", ha insistido.