El parque científico empresarial de la Universidad de Málaga (UMA) albergará el primer instituto de hortofruticultura de Andalucía, que crearán el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC)y la institución universitaria malagueña.

El centro se especializará en la mejora de las especies y lucha contra las plagas que atacan a los cultivos de invernadero y a los subtropicales. Nacerá a partir de lo que actualmente es la finca experimental La Mayora, el único centro con sede en Málaga de los 25 que tiene el CSIC en Andalucía.

La rectora de la UMA, adelaida de la Calle, y el director general del CSIC, Rafael Rodrigo, firmaron ayer un protocolo para poner en marcha este instituto de investigación en hortofruticultura, que contará con un mínimo de 35 doctores. Entre ellos figurarán los 15 expertos que actualmente trabajan en la finca La Mayora, que, con 51 hectáreas de superficie, se mantendrá en casi en exclusiva para hacer las investigaciones de campo.

Por el momento los plazos y el importe del instituto están por definir. La rectora de la UMA aludió ayer a su connatural "optimismo" para asegurar que no hay dificultad para hallar financiación en este momento para un proyecto de esta envergadura y que lo inaugurará ella durante este mandato. En cualquier caso, el calendario y los fondos forman parte de los "flecos" que el CSIC y la UMA deberán atar tras la firma, ayer, del protocolo.

Uno de los aspectos sobre el que tanto Adelaida de la Calle como Rafael Rodrigo han puesto el acento fue la apertura de ambas intituciones para acoger a nuevos socios en el proyecto, tanto públicos como privados. La rectora argumentó que el instituto nace con la vocación de "trabajar a la carta", es decir, enfocar sus líneas de investigación muy en consonancia con las demandas y necesidades reales de este sector.

Rafael Rodrigo recordó ayer que las producciones de los invernaderos y de subtropicales son actualmente los más competitivos de la agricultura española. "Tienen incluso más importancia que el olivo y compiten por sus propios medios porque no reciben subvenciones de la Unión Europea".

El objetivo es avanzar en los cultivos. Es decir, lograr cosechas más duraderas,que consuman menos agua y tengan más propiedades para la salud en su composición de minerales o vitaminas. También se busca hacerlas más resistentes.

El grueso de las investigaciones se centrarán en los aguacates, chirimoyas, mangos, litchies, melones, tomates y pimientos. El instituto de la hortofruticultura es el primer centro que se instalará en el parque científico empresarial que la UMA promueve en la zona de expansión del campus de Teatinos.