El Carlos Haya ya ha salvado más de 2.700 vidas con los trasplantes

Casi siempre se valora poco lo que se tiene cerca. Pero los malagueños deben saber que el Carlos Haya es uno de los hospitales punteros en trasplantes a nivel nacional. Ya se sabía que el centro es el cuarto de España y el primero de Andalucía en trasplantar riñones. La memoria de 2009 confirma ahora su empuje en estas intervenciones, pero con otros órganos. El hospital ocupa el octavo lugar nacional en trasplantes de hígado en adultos y el segundo en páncreas.

En total, desde la primera intervención de este tipo que se hizo en 1979 -y que fue de riñón- ya han sido trasplantados más de 2.700 pacientes. La mayoría -2.041- han sido enfermos renales porque el programa fue el primero que se puso en marcha y porque hay una mayor incidencia de estas patologías. Pero el programa de trasplantes hepáticos también se consolida. Desde 1997 en que se inició, ha salvado la vida a 559 personas. Y es más: en apenas 13 años, ha situado al Carlos Haya como el octavo hospital español en trasplantes hepáticos.

Las intervenciones de páncreas son menos numerosas, pero también posicionan al centro sanitario malagueño en muy buen lugar ya que es el segundo hospital en España en estos trasplantes. El año pasado, el Clinic (Barcelona) trasplantó 24 páncreas, el Carlos Haya, 13; el Doce de Octubre (Madrid), 12 y el Reina Sofía (Córdoba), 10.

Unos resultados que se deben a la pericia profesional y a la generosidad social a la hora de donar ya que la maquinaria asistencial no podría ponerse en marcha sin la solidaridad de los malagueños. Y los datos de la provincia son muy buenos. La tasa de donantes por millón de habitantes -40,7- se sitúa por encima de la española -34,3- y también de la andaluza -35,2-.

Pero los profesionales insisten en que estos datos no pueden llevar a la relajación. Los coordinadores de trasplantes de los ocho hospitales del llamado sector Málaga -que incluye a todos los públicos de la provincia, más el Torrecárdenas de Almería, el de Ceuta y el de Melilla- trabajan cada día para mantener el nivel de donaciones lo más alto posible. Y es que pese a la negativa a donar apenas es del 13,5%, hay enfermos en lista de espera no porque falten quirófanos o anestesistas. Sólo porque no hay suficientes órganos para trasplantar. Según la memoria, a finales de 2009 había 206 pacientes esperando un riñón, otros 45 aguardando un hígado y cuatro en espera de un páncreas.

El año pasado, en el Carlos Haya se realizaron 171 trasplantes; 111 fueron renales, 47 hepáticos y 13 pancreáticos. Aunque estas son las intervenciones más llamativas, hay otras que también mejoran la vida a muchos otros enfermos y que van en aumento. Por ejemplo, los trasplantes de tejidos el año pasado se incrementaron un 30% con respecto a 2008, los de médula ósea un 42% y los de córnea un 38,5%.

El año 2009 dejó muchos alicientes para los profesionales: se superaron los 2.000 trasplantes renales y los 500 hepáticos. Además, el Carlos Haya consiguió la acreditación como centro nacional de referencia para trasplantes simultáneos de riñón-páncreas y para trasplante infantil de médula ósea. Unos resultados que son producto de una labor bien hecha, pero que entrañan el reto de seguir trabajando cada día para mantener el listón.