Pese a que desde que el Ayuntamiento de Málaga iniciase el pasado año el proceso de desalojo de La Casa Invisible este se ha mostrado inalterable en su postura de devolver a los malagueños el inmueble, desde la organización siguen intentando que este les conceda la cesión y se pare el proceso judicial. El último paso ha sido doble: por un lado, presentar un proyecto artístico ligado a la rehabilitación de La Casa Invisible y, por otro, enviar una carta al alcalde, Francisco de la Torre, vendiendo los puntos positivos del mismo e insistiendo en volver al diálogo. 

El proyecto artístico comenzaría en breve y trata de documentar en vídeo la obtención de fondos europeos y posterior ejecución de la primera fase de la rehabilitación de La Casa Invisible. Este lo llevarían a cabo los artistas Libia Castro y Ólafur Olafsson, que ya han trabajado previamente en proyectos que han obtenido fondos europeos. De esta manera, La Invisible se escuda en que este proceso no supondría ningún coste a las arcas del Ayuntamiento y que el proyecto de rehabilitación, firmado por el profesor de la UMA José Manuel López Osorio ya está financiado mediante crowdfounding por la propia organización, sin que cuente el Ayuntamiento con ningún proyecto de rehabilitación para el inmueble. 

Además, han recordado que este proyecto fue premiado por el Ministerio de Cultura y valorado positivamente por los técnicos del Ayuntamiento de Málaga. A este se le sumaría el aval de los Museos Reina Sofía y Van Abbemuseum de Eindhoven. Esta pinacoteca es una de las más importantes en Europa en lo referente a arte audiovisual y documental, de ahí que ponga en valor el proyecto. 

Este proyecto audiovisual ha sido tachado por los artistas como "arte útil" y se basa en que los productos artísticos están más allá de las pinturas o las esculturas, categorizando el inmueble y las relaciones que se generan en y con él y de este con la ciudad como una expresión artística por sí misma.