Celia regresa a 'su barrio'

Sin pensarlo dos veces, Celia Villalobos se puso a hacer ejercicio en las máquinas de la Plaza Limeño, en el barrio de La Luz, rodeada de vecinas a las que les hablaba de los beneficios del deporte. "Cuando vengáis con las bolsas de la compra, las dejáis aquí y hacéis diez minutos de ejercicio", les aconsejaba la diputada en el Congreso. Todas la reconocían y se acercaban a ella para saludarla, hasta una de las más mayores le gritaba que había dejado la plancha sólo por verla. "Pero, ¿la habrás desenchufado?", bromeaba la diputada Villalobos. Mientras, los niños que jugaban por la zona, algunos ni siquiera habían nacido cuando ella era alcaldesa de la ciudad, le preguntaban a Julio Andrade, concejal de Participación Ciudadana del Ayuntamiento, quien les resumía un poco la historia. Eso sí, en cuanto aparecieron las cámaras, los niños posaron como si de un actor de Física o Química se tratara. En el centro ciudadano Vistafranca también tuvo su particular baño de simpatizantes con los que debatió hasta de la validez de Belén Esteban como bailarina para ganar el programa Más que baile.

Celia Villalobos se acercó a esta zona, "que estaba muy mal y quería ver cómo ha quedado" y al centro ciudadano dentro de un recorrido que realizó por el Distrito Carretera de Cádiz, en el que comprobó el estado en el que se encuentran los terrenos del futuro bulevar, sobre los que afirmó que es "increíble ver la ofensa a Málaga y la incapacidad del Ministerio de Fomento para resolver un problema que es muy fácil de resolver", simplemente con voluntad. "Es capaz hasta de mantener la estación de Victoria Kent en las condiciones de acceso que tiene, que es un desastre, con tal de no poner en marcha el plan del Ayuntamiento de hacer ese bulevar, que además es el compromiso original del ministerio", concretó.

La visita de Celia Villalobos a los populosos barrios de Carretera de Cádiz, en los que logró una histórica victoria para el PP en las elecciones que ganó como alcaldesa, coincidió con el día en el que se celebraban los 10 años desde que De la Torre asumió las tareas al frente del Ayuntamiento al ser nombrada ella ministra de Sanidad. Para el alcalde sólo tuvo palabras buenas, sobre todo "porque lo está haciendo muy bien".