El querido humorista Chiquito de la Calzada sigue dejando huella en su ciudad natal, que ha inaugurado este miércoles una escultura a tamaño natural en el parque que lleva su nombre, junto al paseo marítimo de Antonio Banderas, en el litoral oeste de la capital. Nacido en la Calzada de la Trinidad en 1932 y fallecido en 2017, el pecador de la pradera, el fistro duodenar y el mismísimo condemor ha sido representado con su gesto más característico: pierna levantada y micrófono en mano -como si a punto de provocar la carcajada estuviese- en un talla de dos metros de altura y más de cien kilos de peso. Representantes municipales de las distintas formaciones políticas, personalidades de la cultura y el humor, familiares y multitud de vecinos han querido estar presentes en la inauguración del monumento en homenaje a este artista y fotografiarse con él mientras gritaban: “Chiquito el mejor” o algunas de sus frases tan míticas como “hasta luego Lucas”. La talla, promovida por la Asociación del Humorismo Español (Asumhes), ha sido elaborada a tamaño real por el artista Ramón Chaparro, quien también es autor de cuatro esculturas que se sitúan sobre la fachada principal de la Catedral de la Almudena de Madrid. Además, está terminada en bronce por Miguel Codina, encargado de la reproducción de las estatuillas para los Premios Goya. El escultor ha advertido de que la figura no ha salido bien del todo porque “Chiquito no paraba de moverse”, lo que ha desatado las carcajadas de los presentes.

Un acto alegre en el que también ha tenido su espacio la tecnología. Y es que la escultura cuenta con un código QR que dirige a una página web donde se pueden observar todas las empresas que han colaborado con este proyecto, una biografía de Chiquito de la Calzada y algunas fotos. Además, aparece en diferentes idiomas: español, inglés, francés y alemán para acercar la vida de Chiquito a todos los que visiten la capital malagueña. Emocionado se ha mostrado uno de los hermanos de Gregorio Sánchez, Tomás Sánchez, por lo que su sobrino Juani ha tenido que leer las palabras que había escruto en su nombre. Ha agradecido el homenaje y ha destacado que su hermano “nos dejó el amor y el humor”. “Si mi hermano estuviera aquí no entendería el porqué de tan merecido homenaje, ya que se fue sin saber lo que significaba para mucha gente”, ha manifestado, al tiempo que ha añadido que "para él hacer reír era tan fácil que no valoraba su talento". El presidente de Ashumes, Tony Antonio, ha agradecido al alcalde de Málaga su disposición para colaborar con en este proyecto, que constituye el primer monumento en honor a un humorista -ha asegurado-, y ha reivindicado “el humor de manera profesional”. Por su parte, el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, ha señalado la dificultad que suponía recoger en una estatua “su dinamismo, la gracia de sus palabras y su creatividad”,y ha apuntado “este gran embajador de Málaga” -así lo ha calificado- ha dejado “una huella imborrable”.   De la Torre ha recordado que este homenaje se suma a la placa que recuerda al artista en el restaurante El Chinitas, así como al busto que hay en su interior y una obra de José Luis Puche en una de sus persianas. Reconocimientos que se unen a la concesión de la Medalla de la Ciudad (octubre de 2018) y el nombramiento de Hijo Predilecto de la Ciudad de Málaga (octubre de 2018). El también humorista malagueño Manolo Sarriá ha manifestado a este periódico que se debería reconocer más a quienes se dedican a hacer reír a los demás, y ha pedido un homenaje a su compañero Juan Rosa, más conocido como El Pulga.