Málaga

Chiringuitos a reventar y turistas satisfechos

  • En Mijas o Fuengirola se ha podido ver a miles de personas disfrutando del buen tiempo

En el término municipal de Mijas los chiringuitos parecen haber hecho "su agosto" durante la Semana Santa. Así al menos lo aseguraba ayer Juan Carlos Belmonte, uno de los camareros del establecimiento La Familia, en la playa de El Bombo. "El Viernes Santo había muchísima gente, casi más que un domingo de verano", recalcó. El delegado de playas de Mijas, Salvador Gallardo, quien se había puesto en contacto con los chiringuiteros de la zona, explicaba ayer a este periódico que "hemos batido todas las expectativas, incluso diría que nos hemos visto desbordados, ya que han venido más turistas de lo que pensábamos". Según Gallardo, el día más fuerte fue el Jueves Santo porque "hay que tener en cuenta que para muchas personas las vacaciones empiezan ese día, por lo que tampoco compran nada para la casa, de forma que comienzan muy fuerte disfrutando a tope de la playa y el buen tiempo".

Esta opinión también la compartió Joaquín Soler, uno de los dueños del chiringuito merendero Virgen del Mar, a cuya terraza ayer al mediodía le faltaban mesas y sillas de la cantidad de personas que querían disfrutar de unos ricos espetos. "El termómetro del verano está en la Semana Santa y la verdad es que la gente ha respondido bien, incluso mejor de lo que pensamos. Parece que los turistas están dispuestos a gastarse dinero", señalaba Soler entre risas. Para él, la explicación de tan buen resultado se debe precisamente al invierno cargado de lluvias y temporales, que ha provocado en los turistas, especialmente en los españoles, que "hayan cogido estos días con muchas ganas". "La verdad es que no esperábamos tan buen tiempo después de ver en la televisión la cantidad de incidencias que hubo en Andalucía por las lluvias", explicaba ayer una turista madrileña, que confesó haber estado "muy preocupada" por no poder pasar la Semana Santa en la Costa del Sol, tal y como lleva haciendo desde hace una década.

Quien se mostró ayer menos optimista, pese a la cantidad de personas que ayer recorrían el paseo marítimo de Fuengirola, fue Concepción Molina, dueña del chiringuito El Galgo, ubicado en pleno centro de la ciudad. "El Jueves y Viernes Santo estuvo muy bien, pero hoy [por ayer] la cosa está más floja", comentaba, no sin añadir que "esperábamos más gente". "El año pasado por estas fechas los turistas reservaban las hamacas de un día para otro. Ahora muchas se han quedado vacías porque la gente prefiere tumbarse en el suelo y traerse su propio bocadillo", ultimó.

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