Los trabajos de reparación de las cubiertas de cuatro de los edificios más afectados por el tornado del 1 de febrero en Málaga han comenzado hoy en el barrio de Nuevo San Andrés, donde se registraron más daños a consecuencia de los fuertes vientos, de entre 185 y 220 kilómetros por hora.

La delegada del Gobierno andaluz en Málaga, María Gámez, ha anunciado hoy que estos trabajos son los que cubren a las comunidades que carecen de seguros, que supondrá unos 600.000 euros a la Junta de Andalucía.

"Vamos a actuar en las zonas de mayor sensibilidad" ha manifestado María Gámez, que ha destacado que los técnicos van a aprovechar el buen tiempo de estos días para que "cuanto antes" vuelva la normalidad.

Además, ha recordado que será la Empresa Pública de Suelo de Andalucía (EPSA) la que asumirá los trabajos de reparación de las cubiertas de los quince edificios que no cuentan con seguro, y ha añadido que por ahora ninguna empresa se ha puesto en contacto con la institución para pedir ayudas en este sentido.

Con respecto a los edificios que tenían amianto en sus superficies, la delegada ha declarado que el organismo ha asumido la respuesta para apartar este material, cuyos trabajos de retirada y cubierta deben ser coordinados.

Ha anunciado que se ha calculado que estas reparaciones supondrán una suma de algo más de millón y medio de euros, y que después se hará una valoración del resto de daños, como los enseres de los particulares.

Por su parte, la presidenta de la comunidad de vecinos de Hoyo Higuerón numero 10 de la barriada de Nuevo san Andrés, Francisca Godoy, ha manifestado a los periodistas que están desinformados y a la espera de que el perito acuda de nuevo al edificio para valorar los daños.

"Hay casas con lo cierres rotos que no han sido reparados, no todos podemos permitirnos un gasto extra" ha destacado la mujer, que ha apuntado que son muchas las familias que se encuentran a la expectativa porque su situación es de "urgencia".

El tornado fue el más fuerte registrado en España en los últimos 150 años y ha sido calificado de categoría EF2 (Escala de Fujita Mejorada) por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), que informó de que lo vientos afectaron a un corredor de unos cuatro kilómetros de longitud y unos trescientos metros de anchura.

El suceso tuvo lugar a las 21:25 horas del pasado 1 de febrero, se originó en el oeste de la ciudad y se dirigió hacia el este siguiendo una trayectoria bastante lineal, aunque los objetos lanzados al aire afectaron a una zona más amplia.

El Consorcio de Seguros calculó que había unos cuatrocientos vehículos dañados por el tornado, entre 250 y trescientas viviendas y unas setenta naves de empresas o edificios de compañías, como las instalaciones de la Empresa Malagueña de Transportes (EMT).

Según informó la Subdelegación del Gobierno en Málaga, la cifra de damnificados sería de unas 2.500 personas, cifra en la que se incluyen las familias con daños en viviendas, las comunidades de propietarios, las empresas y los dueños de vehículos afectados.