Concesionarios dicen que julio está siendo un mes pésimo en ventas

La situación de los concesionarios de automóviles en la provincia en el último año y medio está siendo de locos. Un continuo vaivén, un diente de sierra en el que no se sabe muy bien qué esperar y qué va a ocurrir de un mes para otro. Ahora vuelve a tocar la cruz y julio está siendo nefasto para los empresarios del sector. A falta de conocer los datos oficiales de la patronal nacional Ganvam -que saldrán publicados en los primeros días de agosto- varios propietarios y directivos de concesionarios consultados por este diario aseguran que las ventas han caído entre un 45 y un 50% respecto al mes anterior y a julio del año pasado.

Las principales causas han sido, por una parte, la finalización de las ayudas públicas del Plan 2000E -a través del cual el Gobierno y la Junta de Andalucía concedían una ayuda de 1.000 euros a los compradores- y, por otra, a que en julio ha subido el IVA en dos puntos, del 16 al 18%, y en, un vehículo con un importe medio de 18.000 euros, ha supuesto un incremento de precio de 360 euros de un día para otro.

Juan Peña, gerente de Garum Motor, un concesionario de Ford en la capital, subraya que "pese a que en julio ya se han acabado las ayudas del Plan 2000E ya habíamos empezado a notar un poco antes un frenazo en las ventas y, con el tema del IVA, se adelantaron muchas compras a junio". Jesús Fortes, jefe de ventas de Málaga Wagen (concesionario de Volkswagen) reconoce la "caída importante en las ventas" pero lo que más le sorprende es que "aunque se vendan menos coches, antes la gente al menos pasaba por la sala de ventas y llevamos varios días en los que apenas entra nadie ni siquiera a preguntar o a verlos". Desde Seat Cormosa, su gerente, José Luis Morales, afirma sin ambages que "julio está yendo rematadamente mal porque no hay clientes, ni cartera, ni ventas ni nada" y destaca que "es el peor mes de julio de la historia". Hay que tener en cuenta que Seat es, en estos momentos, la marca que más coches vende en la provincia y, aún así, el gerente de Cormosa señala que "estamos muy preocupados", lo que indica la situación general del sector.

Nadie sabe qué va a pasar exactamente en los próximos meses, siguiendo ese proceso de incertidumbre del último año y medio de ventas desaforadas y descensos en picado. Los empresarios creen que el principal factor que atenaza las ventas es la inseguridad de los clientes en la economía. "Pienso que la gente está esperando a que el Gobierno ponga en marcha otro Plan 2000E y no sabemos qué ocurrirá en el resto del año porque hay ningún tipo de guión", explica Jesús Fortes, aunque recuerda que, por ejemplo, en su concesionario la marca sigue ofreciendo descuentos de entre 1.000 y 2.500 euros en función del tipo de vehículo que se adquiera. Por su parte, Juan Peña prevé que "agosto seguirá siendo un mes malo" aunque confía en que en el último trimestre del año sea más positivo si se empiezan a apreciar algunos avances en componentes macroeconómicos.

A comienzos del año pasado el sector de la automoción estaba completamente parado e incluso varias empresas tuvieron que cerrar o reducir sus plantillas. Antes del verano, el Gobierno y la Junta de Andalucía aprobaron el Plan 2000E y empezaron a dispararse las ventas por encima del 40% hasta el pasado mes de junio, teniendo un año completo de cierta estabilidad que ahora nuevamente se ve truncada a la espera de ver qué ocurre en los próximos meses.