Pelo mucho más largo, patillas y rizos indomables, canas que aparecen, raíces que crecen y tratamientos varios que dejan de hacer su efecto. El listado de aspectos estéticos relacionados con las peluquerías y barberías se dispara conforme avanzan los días de confinamientos y muchos eran ya los que deseaban que se anunciara la posibilidad de que estos centros pudiesen volver a abrir sus puertas. Unas puertas que se cerraron tras modificarse una primera decisión que generó bastante polémica al considerarlos como centros de primera necesidad y que les obligaba a permanecer abiertos.

Ahora, tras el anuncio del presidente del Gobierno central, Pedro Sánchez, de que las peluquerías y barberías podrían volver a recibir clientes, eso sí, con cita previa y cumpliendo medidas de seguridad, el alivio llegó a muchos de sus clientes y las agendas rápidamente comenzaron a agotar horas y días en muy poco tiempo.

Muchos de sus propietarios decidieron abrir sus agendas tras el anuncio del presidente del Gobierno y en algunos casos aseguran que ya tienen prácticamente dos semanas completas, por lo que aquellos que han dudado a la hora de pedir su correspondiente cita tendrán que seguir esperando un tiempo para poder ser atendidos.

No obstante, las horas pasan y el Gobierno sigue sin publicar en el BOE dicha decisión y las condiciones que deben cumplirse, por lo que han comenzado a surgir dudas en el sector sobre si realmente podrán iniciar el trabajo el próximo día 4 de mayo. En este sentido, las asociaciones mayoritarias de fabricantes de productos profesionales de peluquería y representantes de salones de peluquería en España han trasladado al Gobierno que “no pueden garantizar la apertura de todos los salones este lunes”.

Consideran que hace falta un tiempo mínimo para poner en marcha las medidas de seguridad, reorganizar los salones y colocar la señalización dentro de las instalaciones. Además, hacen algunas recomendaciones como utilizar toallas desechables, la realización de control de temperatura a la entrada o que la ropa de trabajo sea distinta a la de entrada y salida de los centros. Tampoco se aconsejan las joyas y relojes en las manos.

“Estoy trabajando con la agenda de cara a iniciar la actividad el día 4, pero si finalmente no se puede pues tendré que modificarlo”, explicaba David, responsable del centro Emporio. En su caso han comenzado a reorganizar el local para distanciar los sillones y hasta el mostrador de atención lo han cambiando de lugar.

Pedro Porras es otro de los peluqueros que tienen ya casi dos semanas de su agenda sin huecos disponibles para atender a sus clientes. En su caso también trabaja de cara a abrir el próximo lunes, aunque tras hablar con compañeros de Málaga o Antequera también le han surgido las dudas por la falta de publicación de la orden y las condiciones que deberán cumplir, si es que se establecen normas concretas.

De momento, en su barbería solo podrá estar un cliente, usará batas desechables, los guantes serán obligatorios y la desinfección con gel hidroalcohólico también. Además, entre un cliente y otro procederá a la desinfección del material de trabajo y del propio sillón de trabajo. No todos lo tienen tan claro y ante las dudas que surgen y la falta de concreción sobre la forma de retomar la actividad han decido permanecer todavía cerrados a la espera de tener los detalles establecidos por el Gobierno. Ellos han optado por comunicar su decisión mediante las redes sociales o con mensajes directos a sus clientes.