Después de dos días consecutivos de subida, la provincia de Málaga vuelve a registrar una bajada muy significativa de nuevos casos positivos de coronavirus. Si el último balance sumaba 92 enfermos más, en el de hoy tan solo hay que contabilizar 16 nuevos contagios de Covid-19. Otra noticia positiva, en las últimas horas no se ha registrado ninguna muerte relacionada con la pandemia. 

También hay noticias positivas en cuanto a las hospitalizaciones, que en lugar de sumar nuevos ingresos bajan en cinco personas. Por el momento, los centros hospitalarios malagueños asisten a 112 enfermos, once personas menos desde el pasado viernes. De ellos, 23 pacientes se encuentran en las unidades de cuidados intensivos. En cuanto a los curados, también descienden y de los 109 del anterior balance se ha pasado a los 5 de hoy.

En cifras totales, la provincia de Málaga, la más afectada de Andalucía, acumula 3.432 positivos desde que se declaró la pandemia, 261 fallecimientos y 1.612 curados, lo que supone un 47% de los infectados. Dentro de la provincia, en la que un tercio de los municipios se encuentran sin contagios registrados, el distrito sanitario Málaga es el más afectado con 1.957 casos. 

Según las cifras publicadas por la Junta de Andalucía, la tasa de incidencia a 2 de mayo de este distrito es de 311 casos por cada 100.000 habitantes. En cuanto a defunciones, se producen 23 por cada 100.000 habitantes. Los casos acumulados en los últimos 14 días son 406. El total de personas ingresadas a causa del coronavirus han sido, por el momento, 766 y 80 de ellas han pasado por la UCI. El total de defunciones en el distrito sanitario han sido 146 y 921 los curados.

Mayo también asoma con noticias esperanzadoras sobre el control de la pandemia en España, después de registrar la cifra más baja de nuevos contagios desde el 18 de marzo. Aunque habrá que ser precavido y esperar que la curva siga su descenso después de terminar la fase 0 y poner en marcha las nuevas medidas de desescalada del confinamiento.

De hecho, este sábado se vio mucha menos contención en cuanto al acercamiento social de la que pedían las autoridades en las primeras salidas. Sin bares, cines, centros comerciales ni otros espacios de ocio a los que ir, la calle se convirtió en una feria al aire libre. Habrá que esperar para conocer los efectos de la desescalada en los nuevos contagios.