Eran las 17:00 aproximadamente cuando los trabajadores de una clínica dental contigua al domicilio en el que ocurrió el crimen de Paqui y el posterior suicidio de su pareja -presunto responsable del asesinato-, escucharon dos detonaciones, aunque “no sabían de dónde venían”. Tras varios disparos, el hombre de 63 años supuestamente le arrebató la vida a la madre de sus tres hijos. Precisamente el menor de los varones fue el que, al llegar al domicilio, encontró la escena.

Aterrado, se dirigió a la clínica dental que se encuentra en el inmueble inmediatamente siguiente a su vivienda para pedir “auxilio”, relata una de las trabajadoras del centro a este periódico. “Nos explicó que había pasado algo en su casa”. Cuando llegaron, comprobaron que ambos se encontraban sin vida. La mujer se hallaba en el sofá del inmueble, tumbada, con tres impactos de bala en el abdomen y el tórax, según han confirmado a EFE fuentes cercanas a la investigación; mientras que el hombre yacía en el dormitorio con otro impacto de bala. Junto a él, una escopeta. 

De inmediato, los testigos alertaron al servicio de Emergencias 112 Andalucía de que dos personas se encontraban heridas. El centro coordinador entonces movilizó al Centro de Emergencias Sanitarias 061 y a efectivos de la Policía Nacional. Varias dotaciones de agentes y dos ambulancias acudieron al lugar, confirmando el fallecimiento de ambos por impactos de arma de fuego. 

Los trabajadores de este centro de salud dental aseguran estar "sorprendidos" pues durante el tiempo que llevan abiertos no habían escuchado "absolutamente nada". Ni discusiones, ni enfrentamientos entre la pareja. Tampoco lo habían hecho el resto de vecinos del bloque que manifiestan estar "consternados".

La Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género ya ha confirmado este miércoles como crimen machista el asesinato de la mujer, por lo que todos las pesquisas apuntan a que el hombre asesinara a su mujer y, después, se suicidara él.