Cuarta víctima mortal en un atropello en menos de una semana

Semana negra en el tráfico de Málaga. Ayer se registró la cuarta víctima mortal de un atropello en apenas seis días. Se trata de una mujer que cruzaba a pie la A-357 a la altura del Centro de Transporte de Mercancías (CTM). El lunes, un padre y su hijo que iban por la acera fallecieron al ser arrollados por un turismo y el martes, murió atropellada por un camión una anciana que cruzaba por un paso de cebra en Mijas. También ayer se produjo otra muerte vinculada al tráfico. La de una mujer cuyo coche se precipitó al río Guadalhorce en Antequera.

El atropello mortal a la altura del CTM ocurrió a las 6:27. A esa hora, el 061 recibió un aviso de que un peatón estaba inconsciente en el suelo en el kilómetro 65 de la A-357, en sentido Málaga. Cuando llegó la UVI móvil, los sanitarios solo pudieron certificar su muerte. También atendieron a un herido, un varón de 47 años. J. B. S. presentaba traumatismo creaneoencefálico grave, torácico y policontusiones. Fue evacuado al Hospital Clínico. Ayer permanecía en la Unidad de Cuidados Críticos, estable dentro de la gravedad.

En la intervención actuaron el 112, el 061, Policía Local y Guardia Civil. Según los primeros indicios, el hombre y la mujer cruzaban indebidamente la autovía hacia la zona de Los Asperones. Por la mañana, el juzgado de guardia procedió al levantamiento del cadáver de la mujer mientras que el equipo de Atestados la Policía Local recogía datos para tratar de esclarecer las circunstancias en que se produjo el atropello. La víctima era E. M., de 40 años.

Otra mujer, de 71 años, perdió la vida ayer en otro accidente de tráfico. Ocurrió en Antequera, en el puente Lucena sobre el río Guadalhorce y que es la salida desde esa localidad hacia Córdoba. Según los primeros indicios, el coche en el que viajaba cayó al cauce fluvial tras sufrir una colisión en la parte posterior. Debido al golpe, el conductor - su marido- habría perdido el control del vehículo que se precipitó al río. El siniestro fue comunicado sobre las 10:40. Se produjo exactamente en la A-343, en el kilómetro 3. Personal de Bomberos, Guardia Civil y 061 se trasladaron de inmediato al lugar. El coche quedó sumergido bajo el agua con el matrimonio dentro. Con una navaja, el conductor logró cortar el cinturón de seguridad y salir del vehículo. Pero la mujer quedó atrapada dentro.

Cuando llegaron los bomberos, ni siquiera se pusieron los trajes de neopreno para no perder tiempo y se tiraron al río para intentar salvar a la mujer. Pero su esfuerzo fue inútil. Solo lograron rescatar su cadáver. De todos modos intentaron reanimarla, pero no lograron revertir su situación. La primera UVI móvil que desplazó al 061 al lugar tampoco pudo hacer nada por ella. Ahora la autopsia deberá determinar si la víctima falleció por el golpe al caer o por ahogamiento.

El juez de guardia delegó en la Guardia Civil el levantamiento del cuerpo. El hombre que conducía el vehículo, entre tanto, presentaba síntomas de hipotermia. Tiene 72 años. En el siniestro intervinieron dos dotaciones del Consorcio Provincial de Bomberos; una de Antequera y otra de Campillos. El 061 tuvo que enviar al lugar del accidente una segunda unidad dado que cuando comenzaron a llegar los familiares de la fallecida, algunos sufrieron crisis de ansiedad.