Agentes de la Policía Nacional han detenido en Málaga a siete personas, tres de ellas por su presunta pertenencia a un grupo organizado dedicado a la comisión de hurtos y robos con fuerza, y las otras cuatro por supuesto delito de receptación. Fueron arrestados in fraganti el pasado día 21 de octubre mientras mercadeaban con la mercancía sustraída.

La investigación comenzó a primeros de octubre, a raíz de una actuación policial llevada a cabo por agentes de la Comisaría de Distrito Centro, en relación con un robo con violencia perpetrado en por dos individuos en la zona del centro de la capital.

Cuando las investigaciones se cruzaron con otras indagaciones que llevaban a cabo agentes del Grupo de Robos relativa a una banda criminal especializada en cometer delitos contra el patrimonio, los agentes constataron que los dos investigados por el robo con violencia eran integrantes de este grupo criminal, según han informado desde la Comisaría Provincial.

Se inició entonces un dispositivo conjunto, dando como resultado el arresto de un total de siete personas, así como la recuperación de numerosos efectos procedentes de los hechos investigados, según han precisado.

Organización jerarquizada 

Los investigadores constataron que los componentes de este grupo estaban perfectamente organizados y jerarquizados existiendo entre ellos un claro reparto de funciones.

Según las pesquisas, el grupo se desplazaba por distintos puntos de la provincia de Málaga y elegían los establecimientos comerciales en los que hurtar. Así, mientras uno esperaba en el exterior, los otros se ocupaban de sustraer productos. Al final de la jornada contactaban con el receptador para hacerle entrega de los efectos sustraídos.

Los investigadores también identificaron a los miembros de la red, siendo localizados y detenidos cuando hacían una entrega de efectos robados en el establecimiento de uno de los receptadores. También fueron arrestados tres miembros de la banda y otras cuatro personas, en el momento en que mercadeaban con el producto de los hurtos de la jornada.

Igualmente, en el transcurso de las pesquisas, los agentes se incautaron, en el negocio de uno de los receptadores, de 28.000 euros en billetes y 34.283 euros en monedas, dos carabinas de aire comprimido, tres pistolas simuladas, una defensa tipo policial con dispositivo de disparo simulado, unos grilletes y material electrónico, entre otros efectos.

Durante los registros los investigadores recuperaron numerosos efectos procedentes de los hurtos investigados, como ropa, productos de alimentación, bebidas alcohólicas, joyas, colonias, herramientas y aparatos de electrónica.