La ciudad de Málaga cuenta en la actualidad con un total de 8.000 bares y restaurantes que emplean a más de 30.000 personas y representa más del nueve por ciento del PIB de la ciudad. De ahí, que el Ayuntamiento “para reactivar la actividad económica" y en colaboración con Asociación de Hosteleros de Málaga (Mahos) haya aprobado el decreto que autoriza la ampliación de las terrazas y una mayor ocupación de la vía pública. “Va a suponer un poco de aire para el sector porque dadas las condiciones de apertura que se habían dado, era complicado”, manifestó el presidente del colectivo, Javier Frutos, para quien aun siendo “un alivio” es consciente de que “será difícil lograr rentabilidad”.

“Es la mejor forma posible de abrir, y es posible que en estas condiciones algunos más se animen”. No obstante, y aunque la asociación desconoce cuántos bares y restaurantes comenzarán su actividad en la fase 1 “se palpa que no serán muchos”. El presidente de Mahos aprovechó para “pedir responsabilidad y hacer el mejor uso posible de las terrazas”.

Así, los propietarios de bares y restaurantes dispondrán del doble de espacio del que tienen para instalar sus sillas y mesas en la vía pública. Eso sí, tendrán que ajustarse al decreto elaborado por el Ayuntamiento que establece entre otras medidas, la obligatoriedad de dejar un paso peatonal para facilitar el tránsito y una distancia de dos metros entre las mesas. También se permitirá la ocupación de las plazas adyacentes a los locales que no puedan ampliar delante de su fachada. De prosperar la propuesta presentada por la Junta de Andalucía al Ministerio de Sanidad, la provincia de Málaga, logrará el próximo lunes la fase 1.

El documento establece que para ello, los titulares que cuenten con autorización o en su caso, aquellos a los que, durante el plazo de vigencia de las restricciones sanitarias, les sea concedida, deben dejar obligatoriamente una línea de separación de dos metros entre las mesas. En concreto, será de manera frontal, tomando como referencia la línea de fachada del establecimiento del local; o de manera longitudinal, manteniendo la distancia de seguridad suficiente respecto a pasos de peatones, accesos a inmuebles y garajes, y propiedades colindantes.

"Va a dar un poco de aire al sector, pero aun así la rentabilidad será difícil"

El decreto también autoriza ampliar hasta el doble de la superficie que el titular tuviera concedida en la actualidad, de forma que está permitido ocupar la vía pública con el mismo número de mesas y sillas que cabían con anterioridad pero respetando la distancia de dos metros entre mesas.

También se permitirá la ocupación de las plazas adyacentes a los locales de hostelería y restauración, siempre y cuando en la vía en la que esté ubicada su ocupación no permita que pudiera ampliarse la superficie a ocupar y dadas las características de las calles se colocarán las mesas y sillas atendiendo a las instrucciones de la inspección de vía pública.

La ampliación de la ocupación permitida será posible si se deja en todo momento un paso peatonal libre no inferior a dos metros para tránsito de las personas, con separación de un metro de los portales de viviendas, accesos a garajes y vados.

También tendrán que respetarse los pasos de peatones, rebajes para personas de movilidad reducida, o paradas de vehículos de servicio público, entre otros. Además, el decreto recoge que en los pasajes y calles peatonales, la distancia será de tres metros para el acceso de vehículos de emergencia, siendo de cuatro metros cuando la calle sea de preferencia peatonal.