Despensa tropical en La Axarquía

Velez-Málaga podría considerarse como una de las regiones principales de España de piedras preciosas comestibles. Los aguacates, mangos y papayas actúan como esmeraldas, citrinos y andesinas. Y su riqueza no está solo en su precio sino también en su intenso sabor. En darles su valor anda Tropical Millenium, una empresa afincada en plena Axarquía que lleva 14 años comercializando estas frutas. El origen del nacimiento y el modelo de negocio se debe a la experiencia en el sector que tienen los dueños y la zona en la que viven.

"No movemos fruta sin más, tenemos en cuenta su origen y su calidad", explica Vanesa Moreno, responsable de marketing de la compañía. El sabor es el "primer criterio" para su selección. Moreno ensalza la importancia de la relación con el cliente, por eso afirma que más que vender productos aportan "soluciones con coordinación, valor e innovación". El objetivo común, según relata, es recoger la mejor papaya para luego comercializarla en todos los Mercadona de España. "Buscamos solucionar las necesidades gastronómicas y sociales de los clientes", explica Javier Fernández, gerente del negocio, que detalla que basan su trabajo en función de los orígenes del producto, de la época y de la logística, todo aunado para "satisfacer las exigencias de los compradores".

Miguel Páez, otro de los gerentes de Tropical Millenium, es taxativo en su forma de entender el negocio: "Yo no quiero clientes para mi fruta, yo quiero fruta para mis clientes". El matiz está, en que a pesar de ser comercializadores, están cerca "de los propios productores". "Trabajamos directamente con ellos porque la gente tiene que creer en el proyecto", explica. Como Juan José Diego Barquín, agricultor de Velez-Málaga que cultiva la gran parte de papayas y mangos que acaban en las fruterías de Mercadona. "Una de nuestras preocupaciones principales es que los almacenes compren la fruta en su momento y que sean españolas", manifiesta.

Tropical Millenium trabaja directamente con los 88 Mercadona de Málaga, aunque también puedan venderse sus productos en las fruterías de los más de 1.500 establecimientos de esa firma en el resto de España. "Trabajamos con todos los eslabones de la cadena para generar una experiencia positiva que derive en la repetición", explica Moreno, que incide en su compromiso con la fidelidad con el cliente.

Entre 70 y 80 personas realizan diversas labores en esta empresa que suele trabajar los doce meses. "Hemos evolucionado para tener productos todo el año", dice Páez, porque cuando no es época de cultivo nacional -que suele ser de mayo a octubre- recurren a otros países productores como Perú, Chile, Brasil y México para adquirir las frutas.

La empresa veleña agradece a Mercadona la exigencia que marca para sus productos, porque además de ser "transparente", les ayuda "a conseguir la mejor fruta posible". "Nos escuchan, comparten decisiones y trabajamos de manera flexible".

Miguel Páez tasa en un 10% el total de su producción que va a parar a Mercadona. El resto de la producción se dedica generalmente a la exportación.

"Antes se pensaba solo en el fabricante, ahora también en todos los eslabones de la cadena", es la máxima con la que trabaja principalmente Tropical Millenium, que presume de su comunicación, transparencia y la implicación que tienen con todos sus socios y trabajadores, "algo poco común en el sector", sentencia el gerente Javier Fernández.