La Diputación gasta 100.000 euros al año en la Escuela Taurina

La formación de profesionales taurinos cuesta cada año a la Diputación de Málaga alrededor de 100.000 euros a través de la Escuela Taurina Provincial. En la mayoría de las provincias que contemplan estos estudios, son las propias diputaciones las que se encargan de su gestión, asignándoles una cantidad en su presupuesto, mientras que la institución ha sacado a concurso público por 206.000 euros para los próximos años 2014 y 2015 el funcionamiento de este centro de enseñanza. Desde que el anterior presidente de la Diputación Provincial, Salvador Pendón (PSOE), recuperó la Escuela Taurina, ésta ha sido la manera de obrar, que el actual equipo de gobierno de la institución ha mantenido sin variaciones.

El precio inicial de licitación es el mismo que en años anteriores, algo más de 100.000 euros por curso, con la salvedad, explica el diputado del área, Jacobo Florido, de que en esta ocasión el contrato se hará por dos años -prorrogable por otro año más-, por lo que el precio final asciende a 206.000 euros. A pesar de los recortes en la Administración Pública, para la licitación de la escuela de toreros se ha decidido mantener las cantidades de otros ejercicios, aunque a la hora de valorar las ofertas se tendrán en cuenta las mejoras que las empresas interesadas en el concurso puedan aportar. Aún así, Florido reconoce que no son muchas las empresas que se dedican a este tipo de formación tan específica, por lo que normal es que concurra la que actualmente la gestiona.

La inscripción de los alumnos en la Escuela Taurina es gratuita, por lo que todos los fondos para la enseñanza provienen de los 100.000 euros anuales que aporta la Diputación, a excepción de los "30 erales para clases prácticas y la bravura de 60 vacas vírgenes", que son cedidos por la concesionaria de la plaza de toros de La Malagueta para los alumnos. Durante este curso, que se alarga desde enero a diciembre, con el mes de agosto de vacaciones, son 27 alumnos los que están matriculados. A estos hay que sumar varios más menores de 12 años, que pueden asistir a las clases -siempre que tengan autorización y vayan acompañados de un adulto-, aunque no pueden constar como inscritos. La edad mínima de matriculación es 12, ascendiendo la máxima a 25.

Óscar Plaza, gerente de la Escuela Taurina Provincial, explica que normalmente los alumnos están varios años seguidos en la escuela hasta que debutan como novilleros con picadores. De la enseñanza se encarga el director artístico de la escuela, Fernando Cámara, que cuenta con José Antonio Trujillo como profesor ayudante. Plaza explica que del dinero aportado por la Diputación se han de sacar los sueldos para todos los trabajadores del centro educativo, por lo que la asignación que tienen es casi "simbólica". "Con ese dinero cubrimos gastos, porque a los alumnos no les cuesta un solo euro estar aquí", concreta el gerente, que comenta que los aficionados también acuden a la escuela para practicar de forma gratuita a través de la Asociación de Aficionados Prácticos de Málaga.