La EMT pide al Metro viales para autobuses en la zona de obras de Juan XXIII

Esta circunstancia puede demorar el momento en que los operarios empiecen a abrir las zanjas en esta parte de la línea 1

S. Sánchez / Málaga

17 de julio 2009 - 01:00

Las relaciones entre el Ayuntamiento de Málaga y los responsables directos de la obra del Metro, desde hace meses marcadas por la normalidad y el buen entendimiento, sufren una pequeña alteración. Y en esta ocasión, como ya ocurriera tres años atrás, en el inicio de los trabajos del suburbano en la zona de Carretera de Cádiz, con los desvíos de tráfico como punto de fricción. El escenario se localiza en este caso en el entorno de la Avenida Juan XXIII, vía sobre la que ya tendrían que estar trabajando las máquinas pantalladoras del ferrocarril urbano y que no lo hacen después de que el Consistorio haya planteado la necesidad de habilitar carriles paralelos a las futuras zanjas para el paso de los autobuses de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) que circulan por esa zona.

La alternativa de tráfico diseñada por los técnicos de la concesionaria del Metro, que según fuentes próximas al proyecto fueron acordadas y consensuadas hace meses con el área de Movilidad del Ayuntamiento, ha despertado ahora el temor de los dirigentes de la EMT, que consideran que la alternativa dibujada conllevaría importantes efectos negativos sobre el transporte público, especialmente sobre la línea 15 (La Virreina-Santa Paula), también conocida como la de los hospitales, que anualmente transporta a unos cuatro millones de viajeros.

Según reconoció el gerente de la sociedad municipal, Miguel Ruiz, existe gran "preocupación" ante la decisión del Metro de desviar el trazado de esta línea por la barriada de Los Corazones, alargando el recorrido normal de los autobuses en unos 1,2 kilómetros, lo que ampliará la frecuencia de los vehículos en unos tres o cuatro minutos. "Lo que queremos es que se haga lo mismo que se hizo en Carretera de Cádiz, donde los autobuses tenían un carril exclusivo para poder circular", comentó. Con ello, se quiere garantizar el paso de estos vehículos por su recorrido actual.

Otro de los motivos de queja expuesto es que el corte de Juan XXIII ante la apertura de las zanjas hará que el grueso del tráfico sea desviado por Los Corazones, compartiendo carriles con los autobuses. "Meter los autobuses con el tráfico en general es una barbaridad", apostilló Ruiz, quien señaló que se ha pedido al Metro que se "reestudie" el plan de tráfico.

Esta petición puede alterar sensiblemente las previsiones de la concesionaria del suburbano, toda vez que el acuerdo alcanzado con el Ayuntamiento pasaba por impulsar obras al mismo tiempo en el trazado que se extiende entre el bulevar Louis Pasteur y la zona de El Perchel, al objeto de evitar lo ocurrido en Carretera de Cádiz, donde los tramos fueron autorizados a trozos. A día de hoy, sin embargo, los operarios sólo están trabajando de manera activa en un pequeño tramo de Louis Pasteur, quedando aún pendiente de comienzo el grueso de la infraestructura.

En este sentido, cabe recordar cómo los responsables de la Junta de Andalucía encargados de la obra del Metro presentaron el pasado mes de febrero a los vecinos del entorno de calle La Unión el programa de actuaciones contemplado para este espacio, información en la que se incluían los desvíos planteados para garantizar el paso del tráfico por este punto.

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