Con una carta dirigida al abogado de la familia de la niña con autismo de Rincón de la Victoria y a tan solo dos días del inicio del curso escolar, Educación lanzó ayer un ultimátum para forzar la escolarización de la menor. El escrito está firmado por la directora del que hasta ahora había sido el colegio de la niña, el Gregorio Marañón de La Cala del Moral, pero en el mismo se advierte de que "siguiendo las instrucciones de la Delegación Territorial de Educación y atendiendo a la normativa vigente" se le recuerda que la niña no está escolarizada ni en ese centro ni en ningún otro, dado que el expediente sigue abierto en el colegio, aunque sin llegar a formalizar la matrícula.

La pequeña dejó de acudir al Gregorio Marañón después de que los padres de sus compañeros iniciaran una huelga -previa comunicación a la dirección del centro- ante las presuntas agresiones de la menor; por lo que no llevaron a sus hijos a la escuela, dejando a la niña sola. Los médicos aconsejaron entonces que la niña dejara el colegio y hasta ahora lo que se estaba haciendo era intentar buscar un nuevo centro para la pequeña. La madre de la menor, Eva Reduello, aseguraba la semana pasada que después de varias reuniones, algunas incluso en Sevilla, la Delegación de Educación les ofreció dos colegios bilingües dentro del municipio, o bien, dos centros sin esta particularidad, pero ya fuera de la localidad. Pero en ninguno de ellos les ofrecían "garantías por escrito" de que dispongan de los recursos necesarios para atender a su hija. Es lo único que pedían y piden, mientras la niña se impacienta por el comienzo de las clases; quiere empezar el cole.

Sin embargo, hoy, cuando sólo queda un día para de comienzo el curso lo que tienen es una carta en la que Educación les recuerda la obligación de formalizar la matrícula de la niña antes de que empiece el curso escolar para la etapa de Primaria; "lo que le comunico a los efectos oportunos", dice la directora del centro en el escrito.

El abogado de la familia, Jesús Marín, recuerda que si la menor no ha estado asistiendo a clase desde el mes de marzo no ha sido precisamente por capricho de los padres sino que responde a las recomendaciones vertidas en los informes de los especialistas que tratan a la menor, que además aconsejan que su regreso a un centro escolar vaya acompañado de un programa específico para su adaptación. Por ello, se mostró sorprendido ante el ultimátum lanzado por la Delegación de Educación.

El hecho que derivó en que la pequeña dejara de acudir al Gregorio Marañón está siendo investigado por el Juzgado de Menores. Tras poner el caso en manos de la Fiscalía por el posible desamparo que pudo sufrir la niña tras encontrarse sola en clase, por la huelga de sus compañeros, los padres acudieron igualmente a la Guardia Civil a interponer una denuncia. El objetivo no es otro que depurar responsabilidades, ya que la menor ha sufrido mucho desde entonces, como los informes médicos demuestran.