Emasa corta el agua a 6.000 usuarios este año por el impago de la factura

Los enganches ilegales a los contadores de agua y los problemas de impago por parte de algunos usuarios han existido siempre, aunque es en el último año cuando se ha disparado el número de casos de fraudes y de aquellos que terminan en los tribunales por no abonar las facturas pendientes. Sólo en los primeros 11 meses de este año, la Empresa Municipal de Aguas (Emasa) de Málaga ha iniciado más de 37.000 expedientes de corte de suministro por impago y que han terminado con la interrupción del servicio a alrededor de 6.000 clientes en la capital, incluso con el apoyo de la Policía Local en algunos casos para poder acceder a los contadores.

La grave crisis económica ha agudizado un problema que en lo que va de año ya ha supuesto un incremento del 4,2% en el número de casos de impago con respecto al mismo período de 2010, según los datos facilitados por la empresa municipal a este periódico. Esta extrema situación se ha extendido cada vez entre más barrios de la ciudad y ya no es sólo frecuente en las zonas más marginales, aseguró la concejal de Medio Ambiente en el Ayuntamiento de Málaga, Ana Navarro, que justificó el corte de agua en el hecho de que "si no cobramos en algunos casos estaríamos creando un precedente y un agravio comparativo con el resto de los ciudadanos que sí abonan religiosamente sus facturas, por lo que queda más remedio que hacerlo e incluso demandar estos casos".

La vía judicial es la última opción a la que Emasa suele recurrir en caso de impago una vez que se han agotado el resto de opciones. El principal obstáculo de optar por este intento de recuperar la deuda es que los procedimientos suelen dilatarse demasiado en el tiempo y la empresa municipal de abastecimiento llega a tardar una media de entre dos y tres años en cobrarla.

Además, antes de llegar a la interrupción definitiva del suministro, se opta por la vía de la negociación y la fracción de los pagos pendientes. Únicamente cuando se ha agotado esta posibilidad, el caso termina en los tribunales como ya ha ocurrido en lo que va de año con los más de 250 expedientes de demanda que se han iniciado a clientes con los que no se ha llegado a acuerdos de pagos o se les ha encontrado en situación de fraude.

Precisamente con respecto a los fraudes, la empresa municipal de abastecimiento ha reforzado la vigilancia en el último año y se han realizado más 1.200 inspecciones, de las que se han levantado un total de 563 expedientes a usuarios después de comprobar que disponían de agua de la red de forma irregular. Esto supone un incremento del fraude detectado de más del 23% respecto al año pasado cuando se detectaron 457 casos. La cantidad defraudada sólo este año podría valorarse en más de 700.000 euros, según los cálculos de Emasa.

De ahí, que se hayan incrementado los esfuerzos en la gestión de los cobros tanto en llamadas telefónicas como visitas domiciliarias para tratar de actualizar los datos contractuales de los clientes y gestionar los acuerdos de pago. El resultado hasta la fecha es que, a pesar de la caída de volumen facturado debido probablemente a la concienciación por la sequía y a la situación económica tan difícil por la que atraviesan numerosas familias y empresas, se están mejorando las ratios de recuperación de deuda, según señaló la concejal de Medio Ambiente. De hecho, el servicio de atención telefónica gratuita (900777420) ha atendido durante los primeros diez meses de 2011 más de 95.600 llamadas entrantes de clientes, de las que más del 40% del total estaban relacionadas con la gestión de cobros.