Los empresarios de playa no quieren que los chiringuitos se muevan de las playas. El presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Playas, Miguel Arrabal, solicitó al subdelegado del Gobierno en Málaga, Hilario López Luna, que la Demarcación de Costas se replantee esta medida y no descartó que en caso de que la respuesta no favorezca a sus intereses inicien medidas de protesta.

En este sentido, destacó que es necesario permanecer en la arena porque eso supondrá "seguir manteniendo los puestos de trabajo", que en la provincia malagueña ascienden a 20.000. Así, señaló que en estos momentos están esperando la decisión de Costas, administración que estudia suprimir los chiringuitos que invaden el dominio público hidráulico, y a la que han solicitado ser concesiones administrativas "a las que la ley permita irse a 150 metros" y tener una terraza suficiente para atender a la clientela.

"Queremos tener asegurada ya la situación porque hay muchas personas pendientes de sus puestos de trabajo", insistió Arrabal, al tiempo que añadió que cree que el Gobierno central "ha entendido que va a ser imposible quitar los chiringuitos de la arena". Más aún, continuó, cuando el propio consejero andaluz de Turismo, Comercio y Deporte, Luciano Alonso, ha respaldado la permanencia de estos espacios en el marco de la legalidad, el respeto a los criterios medioambientales y la garantía del uso público de las playas.

En la provincia hay 400 chiringuitos y, según Arrabal, "debe imperar el sentido común porque una playa no se entiende sin ellos".