Enamorados de sus historias

Hay cientos de motivos para enamorarse, quizá infinitos, pero una historia personal o una declaración de amor pueden ser una excusa en sí misma. El jurado del octavo certamen literario municipal Dime que me quieres falló ayer en el Museo del Patrimonio Municipal el premio del concurso, que ganó una traductora catalana, Montserrat Florenza. Su historia de un mundo inclinado por desamor cautivó al jurado. Según confesó su autora, es pura ficción, pero los escritores José Antonio Garrida Vela y Pablo Aranda y la profesora Amparo Quiles -quienes formaron el jurado-, destacaron su gran valor literario.

El relato ganador se enmarca en la mudanza de una chica que vive enamorada de un chico al que conoció y con el que tuvo una aventura, pero que se encuentra al otro lado del planeta. La protagonista ve que su casa está inclinada e incluso consulta a técnicos, que le confirman que no lo está. Comprende que el suelo se vuelca hacia el lugar donde se encuentra su amado. Entonces intenta olvidarlo, pero un día, sin acordarse, compra el champú que él utiliza, y vuelve a revivir todos los recuerdos. Se muda de casa con la pena de no haberla compartido nunca con su chico. El inicio y el final del relato se enlaza con un libro que él le recomendó. Al principio cuenta cómo se le cayó sin querer de una estantería. "Ahora sé que la inclinación de la casa desvió su trayectoria cuando me lo lanzaste desde Brooklyn; por eso me cayó en un pie. (...) Quizá sea tarde para decirte que a tu puntería no le pasa nada. Pero es que viviendo tan lejos uno siempre llega tarde a todo". Así termina la historia ganadora del certamen.

A esta cita literaria se han presentado este año casi dos centenares de participantes, muchos llegados de fuera de la provincia malagueña, según destacó en la entrega de premios el delegado de Cultura, Miguel Briones. "Esto hace cultura y así es como se hace grande una ciudad", afirmó el edil, que vinculó el certamen con las actividades que el Ayuntamiento realiza para conseguir ser la capitalidad cultural europea en 2016.

Prueba de la presencia de escritores -la mayoría no profesionales- de toda la geografía nacional son la procedencia de los finalistas. El segundo clasificado, Pedro Delgado, sí es malagueño. El tercero, Javier Izcue, de Pamplona. Cada uno se ha embolsado un premio de 1.000 y 500 euros, respectivamente. La ganadora, por su parte, de 3.000 euros. Entre los siete finalistas, hay tres de Málaga.

Florenza se enteró del certamen malagueño a través de un buscador de internet. "Me gusta escribir y busqué algún concurso literario donde participar, pero nunca antes me había presentado a ninguno", señala la catalana, que colabora con distintas editoriales realizando traducciones. Igual que el tercer clasificado, se ha desplazado este fin de semana a la capital de la Costa del Sol para recoger su premio. Dice está "encantada" y confiesa que volverá a Málaga.

Las bases de la próxima edición se publicarán después del verano, mientras hay tiempo para enamorarse.