Enfermeros en pie de guerra contra el SAS

Los enfermeros se declaran en pie de guerra con el Servicio Andaluz de Salud (SAS). La causa es la falta de acuerdo sobre la aplicación de la ampliación de la jornada laboral de 35 a 37,5 horas semanales; una medida acordada por el Gobierno central, pero cuya aplicación depende de la Junta de Andalucía. Ayer el Sindicato de Enfermería -que representa a la mayoría de los 5.500 enfermeros de la sanidad pública de la provincia- dio por rota la negociación con el SAS sobre la forma de llevar a cabo ese incremento y anunció "un conflicto permanente". "Aceptamos el aumento de jornada, pero no vamos a firmar un cheque en blanco para que la jornada sea a gusto de cada gestor", esgrimió el secretario provincial de Satse, Eugenio Pérez.

Desde el sindicato se sostiene que cada gestor aplica la jornada de forma "torticera" y "como le da la gana para ahorrar y seguir recortando". La Mesa Sectorial de Sanidad había iniciado negociaciones con el SAS sobre la forma de aplicar el incremento. Los sindicatos reclaman que sea de manera homogénea en toda la comunidad autónoma para que no haya agravios. Satse da ahora por rotas esas conversaciones.

Pérez dijo que el aumento de jornada está añadiendo pérdidas retributivas a los recortes que ya han sufrido los trabajadores en sus remuneraciones. Como ejemplo citó que el nuevo horario se está utilizando para dejar de pagar guardias a los sanitarios, lo que supone una merma en sus ingresos. También criticó que en ese afán por seguir recortando, los gestores utilicen el incremento de jornada para cubrir urgencias, lo que obliga a enfermeras a desplazarse a centros sanitarios distintos a los suyos para completar las 37,5 horas semanales. Además, citó casos de trabajadoras que estaban en una consulta en Barbarela y que tienen que ir a una planta del Clínico.

Pérez insistió en que Satse asume que haya que incrementar la jornada laboral, "pero sin nuevos perjuicios económicos y sin que su aplicación entrañe problemas para conciliar la vida laboral y familiar". El representante sindical recordó que otros funcionarios autonómicos ya han alcanzado un acuerdo que permite a los trabajadores elegir entre distintas opciones. En cambio, Satse sostiene que en el SAS se está "imponiendo una aplicación de la jornada cuyo resultado es un nuevo recorte en las nóminas de los profesionales". El incremento horario entró en vigor en julio pasado. Sin embargo, cada centro lo ha puesto en marcha en un momento diferente y con su propio criterio.