Enfermos de cáncer deben ir a Granada y esperar hasta 50 días para una prueba

Un diagnóstico de cáncer es siempre un mazazo. Pero si encima hay que esperar más de un mes una prueba para saber la extensión del tumor y cuál será el tratamiento, la incertidumbre se acrecienta. Esa es la angustia que están sufriendo cientos de pacientes malagueños; aquellos que -una vez diagnosticados- tienen que esperar a que les hagan un PET-TAC. Según tres fuentes consultadas, estos enfermos tienen que aguardar más de un mes esa prueba. Una apuntó que tarda "algo más de un mes", otra precisó que la demora media es de 50 días y la tercera estimó la espera entre "un mes y medio y casi dos meses". "No es asumible la demora que hay actualmente para los pacientes de Málaga", apuntó una de las fuentes. Un portavoz de la Delegación de Salud, en cambio, aseguró que por ejemplo a pacientes derivados desde el Hospital Costa del Sol de Marbella la prueba se les ha hecho en apenas una semana.

Pero la espera no es el único inconveniente. Además, los pacientes tienen que trasladarse al Hospital Virgen de las Nieves de Granada para realizársela porque Málaga -pese a tener más población- carece de este equipamiento dentro del sistema público. Algunos enfermos viajan en sus coches y otros se trasladan en ambulancias. Van hasta en fin de semana. Los que pueden, para evitar desplazamientos y demoras mientras su enfermedad avanza, pagan de su bolsillo entre 1.200 y 1.700 euros que cuesta la prueba en una de las dos clínicas privadas de Málaga que disponen de esa tecnología.

El PET-TAC permite determinar con mucha fiabilidad el tamaño y la distribución del tumor y, por lo tanto, si hay más órganos afectados (metástasis); unos datos que son clave para que los médicos sepan si hay que operar, radiar o aplicar un tratamiento paliativo.

Las fuentes consultadas coincidieron en que la provincia de Málaga tiene población y pacientes "más que suficientes" para contar ya con un PET-TAC en la sanidad pública. De hecho, esta carencia ha sido recientemente denunciada por CCOO en el grupo de trabajo sobre infraestructuras sanitarias creado por Madeca, un organismo de la Diputación Provincial. En el Carlos Haya, este aparato se lleva reivindicando sin éxito desde hace casi cinco años.

Mientras Málaga no tiene PET-TAC en ningún hospital público, Granada -que es una provincia con menos habitantes- cuenta con dos aparatos: el Virgen de las Nieves dispone de un PET (que es una tecnología algo más antigua) y un PET-TAC. "No es de recibo que una provincia con la población de Málaga no tenga esta cartera de servicios para las patologías oncológicas, que además van en aumento. Gracias a estas tecnologías se ha avanzado en la curación del cáncer y no es lógico que Málaga no cuente con un PET-TAC. Nos gustaría saber quién ha decidido esta planificación de dos aparatos en Granada y ninguno en Málaga", protestó el responsable de Sanidad de CCOO, José Ramírez.

En la actualidad hay dos PET-TAC en Andalucía, el de Granada y el instalado en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla. El primero atiende a Andalucía oriental (Granada, Almería, Jaén y Málaga) y el segundo a la parte occidental de la comunidad (Sevilla, Córdoba, Cádiz y Huelva).

Una fuente apuntaba que la elección de Granada podría deberse a que es el centro geográfico de Andalucía oriental. Sin embargo, coincidía con Ramírez en que el PET-TAC es un equipamiento imprescindible en Málaga y que las esperas que soportan los pacientes de esta provincia, tratándose de una enfermedad grave como el cáncer, pueden ir en detrimento de la salud de estos enfermos.