El Ensanche se calma

El Ayuntamiento de Málaga empieza desde hoy a extender al entorno comprendido entre la Alameda Principal, al norte, y Muelle Heredia, al sur, (conocido con el Ensanche del siglo XIX) las medidas de calmado de tráfico ya implantadas en otros puntos de la urbe. La iniciativa, que cuenta con financiación de los fondos estatales, convertirá Trinidad Grund, San Lorenzo, Casas de Campo y Tomás de Heredia, entre otras, en vías en las que la prioridad será del peatón, obligando a los vehículos que circulen por las mismas a rebajar sensiblemente la velocidad.

Pero para lograr este objetivo, no vale sólo con reclamar cierta prudencia a los conductores, sino que se ejecutarán una serie de obras en estas calles con el fin de impedir, justamente, que recorrerlas sea del todo cómodo. La apuesta para esta zona urbana pasa por la ejecución de una decena de badenes, que se situarán a la misma altura que las aceras, en las entradas y salidas de varias calles. El objetivo no es otro que obligar al vehículo a ralentizar su ritmo. A ello se suma el cambio de sentido de la calle Somera, actualmente en abierta en sentido norte y que, tras la intervención, tendrá dirección sur.

Desde el Consistorio informaron ayer de que a lo largo del presente mes de octubre y noviembre se desarrollará la primera fase de acondicionamiento de este entorno urbano con el fin de que sea catalogado como Zona 30.

Esta circunstancia obliga a los operarios encargados de la tarea, adjudicada a la empresa Monelec por 363.850 euros, a realizar cortes de tráfico en ciertos tramos, por lo que se pide a los conductores que respeten la señalización que desde hoy estará colocada en la zona, así como las instrucciones de los agentes de la Policía Local.

La previsión del equipo de gobierno del PP pasa por extender esta misma iniciativa a otras zonas de la capital de la Costa del Sol, en una primera etapa en la barriada de El Torcal. No obstante, los responsables del área de Movilidad, encabezada por el concejal Juan Ramón Casero, estudian la opción de llevar a cabo acciones semejantes en el resto de los distritos de la ciudad. Las primeras experiencias de Zona 30 tuvieron lugar hace años en países como Suiza, Francia, Reino Unido e Italia, llegando a España fundamentalmente a dos ciudades: Madrid y Barcelona.