"En España el amarillismo se ha refugiado en la prensa deportiva"

Leer la prensa por internet es ya un hábito extendido entre la ciudadanía. Por ello, la mayoría de medios impresos miman cada vez más sus ediciones digitales, que complementan la información que ofrecen en papel. Todo mientras los grandes gurús de la comunicación diagnostican cuál será el futuro del periodismo, inmerso en un proceso de conversión con la llegada de la era digital. Nadie sabe con exactitud hacia dónde se dirige, pero este catedrático de la Universidad Complutense de Madrid, especializado en prensa deportiva, aporta su visión. Su presencia en la provincia se enmarca como ponente en uno de los cursos de verano de la Universidad de Málaga, en este caso sobre comunicación y deporte en Marbella. Estos programas estivales ya concluyeron, pero a la espera de que se inicie un nuevo curso académico en septiembre, cabe descansar y reflexionar.

-¿La era digital acabará con los formatos periodísticos convencionales?

-Lo que seguro que hará será reducirlos bastante. De hecho, el papel está ya en cierta decadencia o regresión. Que quedará como algo residual, pues veremos a ver, pero lo cierto es que afecta al periodismo en general y a cualquier ciencia o arte que tenga como soporte al papel.

-¿Pero podemos hablar de desaparición de la prensa en papel?

-Yo creo que no, creo que siempre pervivirá el papel aunque sea como soporte minoritario y elitista. Al menos quiero pensar esto.

-Todo va en favor de lo digital.

-Por supuesto. Desde que aparecieron los primeros medios en la Red, allá por 1996, estamos inmersos en una transformación gradual que a lo mejor no nos damos cuenta porque la vemos todos los días. Para apreciarla tendríamos que estar diez años sin ver periódicos, pero sólo hay que mirar un periódico de hace una década o si pudiésemos ver una imagen congelada de una web en sus inicios para comprobar lo que ha cambiado todo. Martínez Albertos, uno de los grandes teóricos del periodismo, hablaba que en 2200 terminaría el periodismo en papel como hoy lo conocemos, pero los plazos y las fechas están para desmentirse, aunque podría ser una fecha de referencia.

-¿Estos cambios serán una oportunidad para reforzar las plantillas de los medios o una excusa para nuevos despidos?

-Desgraciadamente creo que más una excusa para que haya nuevos despidos. Lo que pasa es que también es verdad que por un lado habrá nuevos despidos pero por otro aumentará la oferta por lo que se supone que las posibilidades de cualquier periodista que empiece a trabajar ahora serán las mismas, digamos más precariedad pero también más posibilidades. El secreto estará en ser más versátil. Quizá sea más difícil tener un contrato fijo y duradero, pero más fácil encontrar diversos trabajos más esporádicos.

-¿Estos cambios requieren una especialización o sólo un cambio de chip del periodista?

-Más bien un cambio de chip para trabajar en distintos soportes, pero la base del trabajo será la misma o muy parecida.

-¿Afectará más al periodismo deportivo o a la prensa generalista?

-Creo que a ambos por igual, a toda la prensa.

-¿Las universidades muestran ya esta realidad a sus alumnos?

-Sí, ya es imposible dar clases sin tener en cuenta el periodismo digital. Hace unos años se enseñaba el periodismo tradicional y se hablaba del digital como un capítulo aparte. Pero hoy día no se deberían hacer distinciones. Yo hablo de periodismo en general, que luego tenga diversos soportes, da igual. La esencia será siempre la misma.

-¿El periodismo deportivo debe ser tan riguroso como el generalista o tiene otras licencias?

-Para nada, tiene que ser igual de riguroso. Otra cosa es que tenga licencias desde el punto de vista literario, pero éstas no están reñidas con el rigor, son una forma particular de transmitir la emoción del deporte pero los datos son los datos y el rigor hay que mantenerlo, por supuesto.

-¿La prensa deportiva supera en ocasiones la frontera del sensacionalismo?

-Si nos atenemos a los grandes periódicos nacionales, desde luego que sí. En España no hemos tenido una tradición de prensa sensacionalista generalista por eso el amarillismo se ha refugiado en la prensa deportiva y esto sigue siendo así en la actualidad.

-¿Qué le parece que se publiquen mujeres semi desnudas en los periódicos?

-Es un reclamo más que utiliza la prensa deportiva. Comenzó en la transición con aquella ola de destape que sacudió a España en los años setenta. Pero tampoco creo que sea tan escandaloso, ni tan exclusivo de la prensa deportiva, también en el cine o en la publicidad se usan desnudos o mujeres sugerentes para atraer al público.

-¿Por qué estos meses se publican tantos fichajes que nunca se confirman?

-En los meses de verano, cuando no hay competición, el argumento de venta principal de todos lo periódicos deportivos son los fichajes. Este verano concretamente, con la irrupción de Florentino Pérez, se han producido fichajes sonados en todo el mundo, como Kaká, Cristiano Ronaldo o Benzema, que sí se han llegado a fraguar y han servido para lavar la imagen de estos medios. Pudiera parecer que todo lo que venga detrás será igual y no es así. Muchas veces el aficionado no tiene ni perspectiva, ni memoria histórica y da por bueno un fichaje que no ha fraguado porque al día siguiente se va a hablar de otro y es una ilusión nueva.

-Pero esto supone falta de rigor.

-Absolutamente. Hay una falta de rigor absoluta y un interés comercial manifiesto que va más allá de la mera especulación. Habría que medir y analizar el interés comercial de los periódicos deportivos que en muchos casos están por encima del interés informativo.

-¿Le gusta el fútbol?

-Sí.

-¿Qué opina de la guerra de las televisiones? ¿Ha terminado ya?

-Finalmente parece que habrá una tregua entre Sogecable y Mediapro. Un acuerdo entre ambas compañías parece que dará lugar a una fusión entre Cuatro y LaSexta, es curioso pensar que las dos compañías que más se han odiado en los dos últimos años, ahora hablen de fusionarse. Esto demuestra que del odio al amor solo hay un paso.

-¿Esto dará lugar a un nuevo gigante que monopolizará todo hasta que llegue un tercero?

-Será así, pero el tercero ya ha salido, que es Telecinco. Lo que pasa esta fusión tendrá sus consecuencias empresariales pero la audiencia la notará menos porque no se va a crear una única cadena. Desde Mediapro decían que se iban a crear ocho cadenas, entre las de acceso libre, codificado, pago por visión... El telespectador no va a percibir un gran monstruo sino ocho pequeñas cadenas, aunque todas pertenezcan a la misma empresa.

-Como dice que le gusta el fútbol, ¿cuál le parece la mejor liga del mundo?

-A mí la española, sin duda alguna, por mucho que se hable de la inglesa, porque con la italiana desde luego que disfruto poco. La inglesa realmente tiene una capacidad singular para luchar los 90 minutos, un fútbol físico y buenos jugadores pero salvo dos o tres equipos el resto tienen menos nivel. Sin embargo, mira la española, el Málaga llegó el pasado año de Segunda y ha sido un grandísimo equipo con poco presupuesto.

-¿Por qué el baloncesto no termina de enganchar a la audiencia pese al nivel de la liga y los resultados deportivos conquistados?

-Es un reflejo de lo que pasa en la sociedad. Vas a un colegio y el 90% de los niños juegan al fútbol y el resto al baloncesto. Los medios quizá favorezcan al fútbol pero es lo que ocurre en la calle, se podrían analizar los motivos pero es lo que más atrae.

-Muchos niños querrán ser futbolista para ganar lo mismo que sus estrellas, pero también algunos universitarios se preparan para ser periodistas deportivos, ¿ganan lo mismo?

-No, para nada, quitando a cuatro, sobre todo de la radio y quizá alguno de la televisión, nadie cobra mucho. Desde luego no en prensa escrita.