Gabino diego regresa a su vida ficcionada

TEATRO ALAMEDA

Han pasado ocho años desde que Gabino Diego irrumpiera con sus soliloquios sobre el escenario pero su "humor blanco" sigue intacto. El actor presentó ayer en el Teatro Alameda Una noche con Gabino, la actualización de un espectáculo por el que desfilan hasta 50 personajes populares y anónimos encarnados por un cómico que lo único que pretende es "hacer reír desde el primer minuto", aseguró.

Tras permanecer ocho semanas en cartel en el Teatro Maravillas, Gabino regresa (desde hoy y hasta el domingo) a una ciudad por la que han pasado la mayoría de sus espectáculos, desde Golfus de Roma a 39 escalones.

En esta nueva versión hay una mayor implicación del público, más canciones y personajes de actualidad como Hugo Chávez, Zapatero - "el que más éxito tiene", asegura- Obama, y clásicos como la abuela del cómico. "Gusta mucho a las mujeres mayores. Es un homenaje a ellas que, a veces entienden mejor a sus nietos que a sus padres", comenta.

Dentro del repertorio que ofrece durante hora y media no podían faltar imitaciones como las de su compañero de interpretación Quique San Francisco o el yonqui de Torrente. Gabino rinde un sentido homenaje a los maestros de la profesión desaparecidos en estos años. Y se acuerda de Rafael Azcona, Fernando Fernán Gómez, José Luis López Vázquez y, como no, el recientemente fallecido Manuel Alexandre, a quien dedicó su última función en el Teatro Maravillas. "Era un tío muy libre e independiente que hacía siempre lo que quería. Recuerdo que con setenta y muchos años me dijo un día, 'Gabino, ¡qué me han llamado para hacer teatro!", rememora el actor.

Entre imitación e imitación, Gabino rescata momentos hilarantes de su vida y los recrea con su inseparable guitarra y un karaoke. "Parto de algo que me ha sucedido y lo transformo en ficción", explica el actor. Por este despliegue mnemotécnico recibió en 2006 el Fotogramas de Plata "por votación popular", advierte ufano.

Después de 19 años sobre los escenarios, Gabino Diego continúa con el entusiasmo intacto. Por ahora en televisión y cine no recibe "ofertas interesantes" y se considera afortunado por poder seguir al pie del cañón, llenando el patio de butacas y, sobre todo, "llevando risas a la gente", confiesa. Durante este fin de semana en el Alameda será Gabino Diego en su mejor rincón. "El teatro es como una madre que siempre de acoge", sostiene.