La llegada del tren de alta velocidad (Ave) barato a Málaga está un poco más cerca, aunque aún quedan bastantes meses para que sea una realidad. Dentro del amplio y engorroso proceso administrativo, Adif ha firmado este lunes con los tres operadores que, por ahora, competirán por ese servicio en toda España (Renfe Viajeros; Intermodalidad de Levante -Ilsa-, formada por Trenitalia y Air Nostrum; y Rielsfera, de la firma gala SNFC) el acuerdo marco que marca las reglas de juego de cada empresa cuando se liberalice completamente el mercado, lo que ocurrirá a partir del 14 de diciembre en toda la Unión Europea.

Este acuerdo es el documento que da seguridad a las empresas y le permite saber a qué atenerse en los próximos años, a la vez que, en una segunda fase, repartirá los horarios comerciales para los trenes en las líneas de alta velocidad Madrid-Sur (que va a Málaga y Sevilla), Madrid-Levante (a Valencia y Alicante) y Madrid-Barcelona.

“El modelo de Adif se apoya sobre la propuesta de establecimiento de Acuerdos Marco de larga duración con las empresas ferroviarias, con el objetivo de garantizar la seguridad jurídica y la posibilidad de acometer las importantes inversiones necesarias en el mercado ferroviario. A su vez, estos acuerdos persiguen que el administrador de infraestructuras pueda optimizar la capacidad de sus líneas y afianzar un modelo de sostenibilidad, asegurando los tráficos en un periodo de varios años”, explicaron desde el organismo público a través de un comunicado de prensa.

Isabel Pardo de Vera, presidenta de Adif, fue la que firmó esos acuerdos y apuntó que “la liberalización estimulará el sector ferroviario y mejorará la movilidad de las personas, ofreciendo más y mejores servicios y una mejor productividad global del sistema”. Pardo de Vera hizo también referencia a la lucha contra el cambio climático y la actual pandemia del coronavirus, dos elementos contra los que, expuso, podrá luchar el transporte ferroviario. En este sentido, señalan desde Adif que “el brote de Covid-19 muestra a los países industrializados que un medio ambiente más limpio y unas poblaciones más saludables se enfrentan mejor a enfermedades y pandemias”.

Aún no hay una fecha definida sobre la llegada del Ave ‘low cost’ a Málaga

España liberaliza el servicio ferroviario por exigencia de la Unión Europea y, en teoría, eso podría beneficiar al cliente porque, al haber más competencia -ahora solo ofrece el servicio Renfe- puede haber una guerra de precios y, por tanto, tarifas más baratas. Habrá que ver cuál es la calidad de ese servicio. Es lo mismo que ocurre en el transporte aéreo desde hace décadas, con numerosas compañías operando, rutas y precios de todo tipo. El transporte ferroviario ha estado monopolizado por el Estado en numerosos países europeos, entre ellos España, y ya toca abrir la mano a otros operadores. En el caso español, darán este servicio de alta velocidad la francesa SNCF y la italiana Treintalia, comiendo así parte del pastel español.

“La incorporación de nuevos actores en la prestación de los servicios ferroviarios de viajeros contribuirá a un uso más intensivo y eficiente de la red existente (de alta velocidad y convencional) y futura, así como a una mayor sostenibilidad de Adif y Adif AV y de todo el sistema ferroviario, manteniendo los parámetros de calidad habituales, como la puntualidad. De todo ello, los principales beneficiarios serán los ciudadanos que utilizan estos servicios”, indicaron desde Adif, que pasará a cobrar el canon de las distintas compañías y, de esa forma, dicen, “incrementará su sostenibilidad financiera”.

El servicio quedará liberalizado el 14 de diciembre en toda la Unión Europea

Adif detalló que tras la firma de estos acuerdos marco, las empresas ferroviarias deberán solicitar ahora la capacidad para cada horario de servicio anual con vistas a organizar los horarios. Se espera que en unos tres meses pueda estar más claro, máxime cuando el servicio entrará en funcionamiento en diciembre. En el caso de Málaga aún no está clara la fecha de inauguración, pero se espera que sea en 2021.

La francesa SNCF tiene capacidad para ofrecer cinco viajes al día en cada una de las tres líneas mencionadas (Barcelona, Valencia y Málaga/Sevilla) mientras que Ilsa hará 16 frecuencias diarias. Ambas empresas invertirán en torno a 900 millones de euros, de los cuales 700 serán de SNCF. Su intención es operar los próximos 10 años en España. La empresa francesa quería arrancar el mismo 14 de diciembre e Ilsa anunció que lo haría en 2022, aunque habrá que ver si hay cambios por la crisis sanitaria provocada por el coronavirus.