El Gobierno rebaja sus inversiones para 2013 y las deja en 284 millones

Unas cuentas para terminar lo poco que sigue en marcha en la provincia de Málaga. Ese es, grosso modo, el objetivo con el que el Gobierno central parece haber diseñado sus inversiones para la provincia en 2013. El documento económico, que ayer entró en el Congreso de los Diputados de la mano del ministro Cristóbal Montoro, continúa la senda de reducción inversora ya iniciada en el presente ejercicio, y cierra sus compromisos en unos 284 millones de euros, 91 menos que en 2012.

Y nada que ver con los más de 1.000 millones que se consignaron en 2010. Una época de bonanza que queda lejos del actual escenario económico en el que se mueve el país. La losa de la crisis pesa al punto de que el reparto de las inversiones por los habitantes de la provincia hace que la media sea de apenas 175 euros, 96 menos que la media nacional. Incluso, Málaga, acostumbrada a la burbuja inversora, se ve ahora por debajo de Cádiz, en números redondos, y de otras tres provincias más tomando como referencia la población.

Pero lo relevante del contenido del presupuesto no está tanto en lo que se refleja negro sobre blanco como en lo que se omite. Las previsiones estatales ignoran nuevamente reclamaciones históricas y compromisos de décadas, caso de los Baños el Carmen, en la capital de la Costa del Sol (se planteó por vez primera hace dos décadas); el corredor ferroviario con el que unir Málaga y Marbella; el anillo ferroviario de Antequera, y la depuradora de Nerja.

Una última intervención ésta cuya ausencia es aún más alarmante si se tiene en cuenta el compromiso del Ministerio de Medio Ambiente por licitar y adjudicar dentro de este ejercicio tanto la redacción del proyecto como la ejecución de la obra. La situación es tal que hay 35 empresas que han presentado propuestas al concurso, valorado en unos 40 millones de euros.

Junto a estos olvidos, cabe añadir el relativo al anuncio puesto sobre la mesa meses atrás de analizar posibles ampliaciones de la red de Cercanías en la provincia, en especial con dos puntos de destino, Marbella (sustituyendo la iniciativa de la Junta del tren litoral) y el Parque Tecnológico de Andalucía (PTA). El presupuesto del Ministerio de Fomento únicamente consigna 182.000 euros bajo el concepto Corredor de la Costa del Sol, sin especificar de qué actuación se trata. En el presupuesto de 2012 este mismo capítulo tenía 682.000 euros.

Tras la culminación de los trabajos de ampliación del aeropuerto de la capital y de la hiperronda, el tren de Alta Velocidad entre Antequera y Granada sigue mostrándose como el proyecto que más dinero recibe. Para 2013, el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), reserva 68 millones de euros con los que dar continuidad a los tajos, lo que supone el 88% de sus partidas para la provincia. Por el contrario, la reserva para el taller de Los Prados es nula. El Metro obtiene otros 6,1 millones de euros, conforme a los parámetros fijados en el convenio firmado por la Administración central y la Junta de Andalucía para el impulso del suburbano.

Tras el ente dependiente del Ministerio de Fomento, el organismo Aguas de la Cuenca Mediterránea (Acuamed) es el segundo con más inversión proyectada, con 64,8 millones. Este departamento, que deja de lado la depuradora de Nerja, apuesta con 28,7 millones por la estación depuradora de El Cuervo, de los cuales 20 millones van destinados a la implantación del sistema terciario. Asimismo, la conducción Cerro Blanco-Atabal obtiene 12,6 millones más.

Tampoco salen especialmente bien paradas las carreteras pendientes en la provincia. A excepción del acceso sur, que acumula un considerable retraso respecto a los plazos inicialmente previstos por Fomento, el resto de intervenciones anunciadas años atrás se mantienen en el cajón, a la espera de que el escenario económico varíe. La conexión sur del aeródromo recibe 11,3 millones, a mucha distancia de los 200.000 euros (misma cantidad que en las cuentas de 2012) que se aportan para el estudio de una Nueva Ronda Exterior en la provincia, y los 200.000 que se destinan al carril bus-VAO Málaga-Torremolinos, en situación de abandono desde hace casi un lustro.