Objetivo cumplido. La séptima edición de la Gran Recogida de Alimentos, organizada por Bancosol, ha logrado acopiar del orden de 600.000 kilos de alimentos desde el pasado viernes hasta la noche de ayer, según confirmó el presidente de la entidad, Joaquín Jiménez.

De acuerdo con el avance de las dos jornadas de recogida en diferentes puntos de la provincia de Málaga, el viernes cerró con unos 230.000 kilos, mientras que superaba los 400.000 kilos alrededor de las 13:30. El último tirón de los cientos de malagueños que han querido participar en esta iniciativa solidaria ha hecho que, según Jiménez, se aproximen a los datos pretendidos.

En la iniciativa han participan 4.000 voluntarios y 340 establecimientos repartidos por el territorio provincial. Ha contado además con el apoyo de la Fundación Unicaja, como patrocinador. El máximo responsable de Bancosol puso en valor el "fantástico comportamiento de los voluntarios y de la gente".

Conforme a los primeros análisis realizados, las aportaciones han seguido la línea de las demandas realizadas por Bancosol. "Ha habido una disminución de arroz y pasta, porque hicimos un llamamiento de platos ya preparados", expuso Jiménez.

Si bien es la más simbólica de todas las acciones de esta entidad solidaria, no es la única. De hecho, el propio presidente aclara que a lo largo de todo el año Bancosol recoge del orden de 6,5 millones de kilos de alimentos a repartir entre las familias más necesitadas.

El número de familias destinatarias se calcula en unas 45.000. Al inicio de la campaña, desde la organización ponían de relieve la existencia de muchas personas que no pueden cubrir sus necesidades básicas, por lo que sigue siendo vital la solidaridad de todos a la hora de donar alimentos.

"Esta iniciativa es un acontecimiento social en Málaga y debemos seguir trabajando por los más necesitados. Hay muchas familias aún en crisis y los malagueños siempre nos hemos mostrado solidarios, por lo que hacemos un llamamiento para poder revertir esta situación", recordaba Jiménez.