Homenaje a un malagueño ilustre

Sentimiento, emoción y orgullo compartido de una familia emblemática de Málaga. Esas fueron las sensaciones predominantes en la tarde de ayer durante el descubrimiento de la placa que pone nombre a los jardines Manuel Atencia García, un espacio público situado en la calle Alcazabilla que une las calles Zegrí y Granada, en la judería, frente al Teatro Romano y junto al Museo Picasso, en homenaje al insigne malagueño, fallecido en 2005. La designación de estos jardines por parte del Consistorio se lleva a cabo tras una propuesta realizada por una comisión gestora constituida para tal fin con adhesiones y cartas de apoyo de 43 asociaciones, diversas instituciones, corporaciones, entidades de la ciudad de Málaga, así como el respaldo a esta solicitud de 2.200 ciudadanos que firmaron por la causa.

El acto que estuvo presidido por el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, quien destacó que "pocas veces una propuesta de esta tipología consigue el apoyo y respaldo de tantas personas. Es un reconocimiento de justicia a un hombre muy vinculado a la sociedad de Málaga y que tanto servicio y dedicación mostró por una ciudad que le dedica un rincón a su figura. Además se trata de un lugar que será muy visitado por todos los malagueños". En el evento quisieron estar presentes una amplia representación de familiares y amigos del homenajeado. Sus seis hijos y nietos acompañaron a su viuda, Inés Robledo, quien tuvo palabras de recuerdo hacia su esposo, y agradecimiento hacia los impulsores de esta causa por la que se le ha dedicado un espacio en la ciudad. "Es un día de gozo y homenaje a un enamorado de Málaga, estoy muy emocionada en este día en que se recuerda a Manolo que seguro se sentiría muy contento por este tributo".

Uno de los momentos de más emoción fueron los vividos cuando Inés Robledo se dirigió hacia sus nietos pequeños recordándoles que "siempre que penséis en el abuelo Manolo, recordadlo como un hombre lleno de virtudes y que nos está viendo desde el cielo". Manuel Atencia García fue concejal y teniente alcalde del Ayuntamiento de Málaga de 1963 a 1971. Vivió gran parte de su vida y murió en la calle Zegrí nº 4. Este inmueble y el nº 2 de la misma vía son los únicos que existen en esta calle y fueron construidos por la familia Atencia, muy cerca de donde se ubica el jardín.

En su época como concejal destaca por su contribución decisiva a la regulación, normalización, homogeneización y modernización de los autobuses de transporte urbano y los taxis de Málaga; fue presidente del Consejo Provincial del Instituto Nacional de Previsión en Málaga desde 1968 a 1971; Procurador en Cortes entre 1967 y 1971, teniendo una participación muy activa en la consecución de la Universidad de Málaga. Abogado en ejercicio, desde 1953 hasta su fallecimiento en 2005; fundador de la Cofradía de los Estudiantes -la casa hermandad dista apenas unos metros de los jardines- y de los colegios El Romeral y Sierra Blanca. Al finalizar el acto se realizó el descubrimiento de la placa conmemorativa que da nombre a tan simbólico lugar y asimismo se entregó una réplica de la misma para que sus familiares la conservaran de recuerdo.