El Valle del Guadalhorceun posible caso de presunto animal. En la mañana de ayer el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil llevó a cabo una inspección en una finca situada en la zona rural El Ratón, en la carretera que une Cártama Estación con el municipio de Pizarra, donde se hacinaban decenas de ejemplares en malas condiciones sanitarias.

La propiedad se divide en dos zonas, por un lado un edificio cerrado como si se tratara de un fortín y donde los agentes hallaron numerosos animales exóticos, como aves, hámsters rusos, ardillas y cientos de tortugas, entre otros muchos. En el interior, según fuentes cercanas al caso, era casi imposible entrar sin utilizar mascarillas, debido a la escasa limpieza del recinto y de los animales.

En otra de las zonas de la parcela se encontraron varias jaulas con pájaros tropicales, como guacamayos y loros, además de un mono, que al parecer pertenece a la especie de los macacos y que, según explicó el dueño durante la inspección, llevaba más de siete años en este lugar tras haber sido depositado por los servicios de aduanas.

Esta actuación se ha producido tras varias denuncias ciudadanas recogidas por la asociación CYD Santa María, que se encarga de la defensa de animales abandonados y maltratados, principalmente équidos. A través de una llamada de teléfono alertaron de la situación de estos ejemplares. En el registro intervino también un responsable de la Oficina Comarcal Agraria (OCA) del Guadalhorce.

Según la presidenta del colectivo, Concordia Márquez, que acompañó a la Guardia Civil durante su visita, el lugar estaba siendo utilizado como depósito de animales para pasar la cuarentena antes de salir a la venta.