La brújula de la Junta de Andalucía en lo concerniente a la futura ampliación del Metro de Málaga sigue sin rumbo definido. Casi ocho meses después de que el presidente andaluz, Juan Manuel Moreno Bonilla, desplazase su compromiso de llevar soterrado el trazado hasta el entorno del Hospital Civil, dando prioridad absoluta a la extensión hasta el Parque Tecnológico de Andalucía (PTA), la Consejería de Fomento parece recuperar la primera idea.

Sin descartar ninguna de las posibilidades de prolongación del ferrocarril urbano, el encuentro que mantuvo ayer la delegada de Fomento, Carmen Casero, con vecinos de Bailén-Miraflores parece mostrar la dirección a seguir. De hecho, según pudo saber este periódico, la reunión fue convocada por la propia delegada en su interés por sondear a los integrantes de la Plataforma No al Tranvía al Civil, sí al Metro hasta el PTA y Campanillas, en relación con la posibilidad de ir adelante con el proyecto subterráneo.

Las fuentes consultadas subrayaron el peso que en la decisión final del Gobierno andaluz tendrá el tercer hospital también comprometido. En este sentido, consideraron que la apuesta por el Metro a la zona norte se abrirá de manera definitiva si finalmente la Junta opta por mantener en los terrenos del Civil la ejecución del nuevo equipamiento hospitalario. Una posibilidad que, según las fuentes, "parece tomada en un alto porcentaje". En las últimas semanas se había manejado como emplazamiento alternativo la zona este de la capital.

Terrenos del aparcamiento del Civil donde se proyecta el tercer hospital.

Ello viene a coincidir con lo expuesto por la plataforma vecinal que trasladaron su respaldo a que la infraestructura se lleve a cabo de manera soterrada, "sobre todo si la gran infraestructura hospitalaria que necesita y demanda Málaga se construye allí". Una cuestión que valoraron desde el colectivo, según su coordinador, Francisco Fernández, es que la Junta "descarta de manera tajante" la posibilidad de llevar a ras de calle la infraestructura.

El incremento de demanda que provocaría la construcción del complejo sanitario (los primeros estudios previos al proyecto hospitalario situaban en unos 2,7 millones los pasajeros potenciales) obligaría a la Junta a poner en marcha un medio de transporte capaz de responder a la misma, justificando la alta inversión económica que necesitará su realización. Los datos manejados por el propio Ayuntamiento sitúan en unos 130 o 140 millones de euros el valor de ejecutar una línea desde la estación Guadalmedina hasta el Civil.

Durante el encuentro, según pudo saber este periódico, los vecinos preguntaron por el posible trazado y si el mismo respetaría el ya contemplado por los anteriores responsables autonómicos para el Metro en superficie. Un detalle sobre el que no supo dar respuesta la delegada, que incidió en que la cuestión es objeto de análisis.

Asimismo, Casero fue clara al incidir en que está abierto igualmente el análisis sobre la ampliación de la red hasta el PTA. Garantizó además a los vecinos que "serán partícipes y contarán con toda la información sobre los trabajos que se vayan desarrollando". Los vecinos estuvieron acompañados de la teniente de alcalde y concejala del distrito Bailén-Miraflores, Elisa Pérez de Siles.