La Junta suspende el PGOU y obliga al Ayuntamiento a corregir sus "deficiencias"

El nuevo Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) de Málaga hace historia al ser el primero de la ciudad que es rechazado de manera taxativa por la Junta de Andalucía y devuelto al Ayuntamiento para que corrija las "numerosas deficiencias" detectadas en su contenido, en especial en lo relativo a las limitaciones fijadas en la Declaración de Impacto Ambiental (DIA), conocida desde hace más de un año por el equipo de gobierno del PP, y el Plan de Ordenación Territorial de la Aglomeración Urbana (Potaum), aprobado el pasado martes.

La determinación de la Administración autonómica, que supone un varapalo sin paliativos para el equipo de gobierno, fue dada a conocer ayer tras la reunión de la Comisión de Ordenación del Territorio y Urbanismo de Andalucía (COTUA), a la que no asistió el consejero de Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Espadas, y que analizó el documento municipal en un encuentro de varias horas en Sevilla. Este órgano, integrado por un máximo de 57 miembros en representación de la Junta, el Estado, los ayuntamientos, organizaciones empresariales y sindicales, colectivos vecinales, ecologistas y consumidores, colegios profesionales y la Universidad, avaló mayoritariamente el informe, con la negativa de los empresarios y la abstención de los ayuntamientos.

"El documento redactado y presentado por el Ayuntamiento de la localidad incurre en errores, defectos e incumplimientos a distintos informes vinculantes y normas que impiden su aprobación por parte de los órganos competentes de la Junta", sentencia en un comunicado oficial la Administración autonómica, que justifica en razones "jurídicas" la imposibilidad de dar luz verde al documento aunque fuese de manera parcial, como se había anunciado.

En este sentido, basan la posición actual en la jurisprudencia creada por recientes fallos judiciales del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) respecto al PGOU de Chiclana de la Frontera (Cádiz), que fue recurrido por una serie de particulares, que alegaron que el texto nunca fue sometido en su totalidad a información pública. La citada jurisprudencia, según informaron desde la Junta, señala que la opción de aprobar parcialmente el Plan General suspendiendo o denegando las partes que deben ser corregidas "hay que limitarla a los supuestos en que la parte que se aprueba mantiene una sustantividad propia".

Textualmente, lo que dicen los magistrados del Alto Tribunal es que "resulta ilícita la aprobación definitiva parcial" de un documento cuando a partir de las modificaciones pueden quedar "en entredicho" aspectos como las determinaciones básicas, la propia ordenación, la delimitación de los derechos de propiedad o las determinaciones estructuras", como, según la Junta, ocurre con el planeamiento de la capital.

En este escenario, el informe de la COTUA aclara que el Plan General de Málaga "no podrá ser aprobado de forma definitiva" hasta que el Consistorio subsane los "errores" detectados, los corrija o los elimine. Para la Junta, el modelo diseñado por el Ayuntamiento y rechazado ahora "incluye sustanciales modificaciones respecto al modelo inicial, lo que se traduce en un alto grado de inseguridad jurídica".

La valoración del organismo regional toma como punto de partida el incumplimiento por parte del equipo de gobierno de las advertencias de las exigencias planteadas en la Declaración de Impacto Ambiental (DIA), que es de obligado cumplimiento, caso del de Aviación Civil, así como de otros informes vinculantes y las directrices marcadas en el Potaum.

Respecto al primero de los informes, destaca que el documento municipal no incorpora modificaciones como la relativa a los terrenos de la Sierra de Churriana, en los que el PGOU plantea la construcción de 600 viviendas y hoteles y para los que técnicos autonómicos proponen su protección; las relativas al sector de Maqueda, donde el Ayuntamiento dibuja 2.600 viviendas, o Arraijanal, donde se prevén 660 viviendas y que la Junta aboga por proteger y destinar a un parque.

Asimismo, la COTUA señala que el Plan General tampoco se adapta al diseño marcado en el Potaum, "cuyas prescripciones deben ser acatadas desde su información pública", extremo éste que no se ha cumplido. Entre otras cuestiones, desde la Junta se precisa que el Consistorio no ha incluido la propuesta del puerto deportivo de El Morlaco el estudio de viabilidad al que está obligado.