La Junta abre una investigación por la muerte de una niña en una guardería

Vecinos y usuarios del centro infantil, que lleva tres décadas abierto en Nueva Málaga, consideran que fue un trágico accidente · El forense practicó ayer la autopsia al cadáver de la pequeña de 22 meses

Una abuela con su nieto en la puerta del centro infantil, un centro conveniado con la Junta de Andalucía.
Una abuela con su nieto en la puerta del centro infantil, un centro conveniado con la Junta de Andalucía.
C. Fernández · Agencias / Málaga

04 de octubre 2012 - 01:00

Tras el fallecimiento el pasado martes de una niña de 22 meses en un centro de Educación Infantil conveniado en el barrio de Nueva Málaga, la delegada de Educación de la Junta de Andalucía en Málaga ordenó a la inspección educativa la apertura de un expediente de investigación para aclarar lo sucedido. Ayer, los inspectores se trasladaron hasta el centro "para realizar todas las averiguaciones pertinentes en este caso" y para empezar "a recabar datos", por lo que la Junta se mantendrá a la espera de conocer "qué depara la investigación", aseguraron desde la delegación.

El delegado del Gobierno andaluz en Málaga, José Luis Ruiz Espejo, trasladó "un mensaje de tranquilidad a todos los padres y familiares", a la vez que expresó "la más profunda consternación" y el "más sentido pésame" de la Delegación del Gobierno a la familia de la niña. Ruiz Espejo también quiso resaltar que, "sobre todo en el ámbito educativo y sanitario, se ha avanzado mucho en la homologación de los centros, en las autorizaciones y en las inspecciones de los mismos".

Los hechos tuvieron lugar sobre las 12:00 del martes en el centro conveniado con la Junta de Andalucía que acoge a 30 niños de hasta 3 años. Al parecer, la pequeña se atragantó y la propia directora de la guardería la trasladó a un centro de salud, donde, pese a los intentos para reanimarla, "no pudieron hacer nada para salvarle la vida", explicó el delegado. Durante el día de ayer los forenses practicaron la autopsia al cadáver de la niña que, según apuntan algunas fuentes, estaba comiendo cuando presentó problemas respiratorios.

De poco más se hablaba ayer en el barrio de Nueva Málaga. La tragedia caló muy hondo entre vecinos y usuarios de esta guardería que ayer abrió sus puertas con normalidad a pesar de la consternación de sus empleados. Es un c'entro veterano en la zona, lleva unas tres décadas ofreciendo sus servicios, por lo que muchos de sus niños de hoy son los hijos de sus antiguos alumnos. Nunca antes habían tenido que lamentar un incidente de esta magnitud.

Sobre las 14:00, Dolores recogió del centro infantil a su nieto. "Ha sido un accidente involuntario, las profesoras son estupendas, mi nieto seguirá viniendo hasta que le toque ir a otro colegio", decía ayer esta abuela, dispuesta a no prestar atención a "difamaciones" sobre el centro.

También María brindaba su apoyo incondicional al personal de la guardería. "Mi nieto está muy bien cuidado, no he tenido ningún problema", aseguró. Por eso, no tuvo dudas en llevarlo ayer a clase. "Se me ponen los vellos de punta nada más de pensarlo", comentó María, que lamentaba profundamente el dolor de la familia de la pequeña. Para ella, "ha sido un desgraciado accidente, han tenido muy mala suerte", dijo, pero agregó que "aquí estamos muy contentos con el centro".

En un bar junto a la guardería los clientes de Miguel Ángel comentaban también el suceso. "Eso le podría haber pasado a cualquiera, no hay que darle más vueltas". Y añadieron que a la directora la tuvieron que atender en el Hospital Carlos Haya con una crisis de ansiedad. "Es lógico, era una niña que tenía a su cargo", decían. Las que no quisieron hacer declaración alguna fueron las empleadas del citado centro.

stats