Málaga

La Junta recupera el compromiso de construir el carril bici del paseo marítimo Picasso en Málaga

  • La inversión estimada es de 2,6 millones de euros, con una longitud de 2 kilómetros 

  • El proyecto, ahora en redacción, prevé ensanchar el paseo hacia la playa para no perder espacio peatonal

Un ciclista circula por uno de los carriles 30 delimitados en Málaga.

Un ciclista circula por uno de los carriles 30 delimitados en Málaga. / Javier Albiñana

La Junta de Andalucía recupera el compromiso de construir un carril bici que permita conectar todo el litoral este de Málaga capital entre el restaurante Antonio Martín y el municipio de Rincón de la Victoria. La decisión, anunciada este miércoles por la consejera de Fomento, Marifrán Carazo, en una comparecencia en el Parlamento andaluz, supone retomar una iniciativa que se puso sobre la mesa hace ahora más de cuatro años en el marco del Plan Andaluz de la Bicicleta y que quedó en agua de borrajas.

Si bien la apuesta pasa por desarrollar una plataforma reservada entre las dos localidades, el primer paso será algo menos ambicioso. De manera precisa, según los datos aportados por Carazo, esta fase inicial tendrá unos 2 kilómetros de longitud y permitirá llevar ese carril exclusivo para las bicis hasta los Baños del Carmen. El valor estimado para esta obra es de 2,6 millones de euros (IVA incluido)

La concepción de este vial como infraestructura metropolitana permite a la Junta salvar los escollos fijados por los servicios jurídicos respecto a la posible construcción de carriles bici en el espacio urbano de Málaga. Su ampliación hacia otros municipios y su vinculación a otras infraestructuras de transporte masivos permiten avanzar en esta línea de colaboración. 

El tramo en cuestión comenzaría en la intersección del Paseo Marítimo Pablo Ruiz Picasso con la calle Fernando Camino, discurriendo sobre la acera sur hasta conectar con los Baños del Carmen, donde hay un pequeño tramo ciclable ya ejecutado.

El detalle técnico sustancial es que para que la franja destinada al itinerario peatonal no se vea reducida, se prevé un ensanchamiento del paseo marítimo hacia la playa. En concreto, del orden de 1,7 kilómetros irían junto a la playa seca, mientras que el resto estaría colindante con la zona de escollarado. Todo ello necesita del visto bueno de la Dirección General de Costas.

Actualmente, los técnicos de la Dirección General de Movilidad están redactando el proyecto, que estará finalizado a lo largo del próximo verano. Desde el departamento dirigido por Carazo se pone en valor que este ramal vendría a enlazar con otra plataforma contemplada por el Consistorio para alcanzar la estación de Metro fijada en el lateral norte de la Alameda Principal.

Esto obligará al Consistorio a recuperar su primer idea de construir una plataforma para unir el Centro con el paseo, proyecto que, cuando estaba apunto de adjudicar, anuló aduciendo la imposibilidadad de garantizar que el proyectado carril bici pueda tener conexión con la Alameda Principal, "que es peatonal, dado que, según la normativa, las bicicletas no pueden circular por las aceras, paseos o cualquier otro espacio peatonal".

A expensas de esta decisión, para la Junta la unión de estas dos infraestructuras dotará al proyecto ahora en elaboración del "máximo grado de intermodalidad". Y ello sin que se tome en consideración una futura y posible prolongación del Metro hasta la zona de la Malagueta. 

La confirmación de la consejería se produce tras varios meses de negociación y conversaciones con el Ayuntamiento para intentar activar parte de los carriles que en su momento formaron parte del acuerdo suscrito entre las dos administraciones. Ese pacto fue rubricado en enero de 2015, y contemplaba la ejecución de una malla con cerca de 69 kilómetros de vías ciclistas. De ellos, el 75% iba a ser ejecutado por la Junta, sin que se haya materializado uno solo; el otro 25%, el Consistorio.

Tras la entrada en vigor de la ordenanza de Movilidad de Málaga, los ciclistas tienen prohibido circular por los espacios peatonales. Y ello acota la posibilidad de que circulen por los paseos marítimos. Esta circunstancia y la obligación de tener que transitar por la calzada, compartiéndola con el resto del tráfico motorizado, ha sido objeto de una importante contestación ciudadana.

La respuesta hasta ahora adoptada por el Ayuntamiento, a la espera de poder impulsar nuevos carriles bici, es la de delimitar carriles 30 en buena parte de la ciudad. Uno de ellos en la zona del Paseo Marítimo Picasso, que queda reservado en exclusiva para bicis y patinetes los fines de semana y festivos. 

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios