A primera hora de la mañana muchas gasolineras de la capital malagueña amanecían con colas. La bonificación de 20 céntimos por litro de combustible ha hecho que muchos clientes apuraran estos días sus depósitos para ahorrarse unos euros. Otros, no estaban al tanto de la medida y se han llevado una sorpresa cuando han recibido sus facturas.

En la gasolinera Repsol, situada en la Avenida Jenofonte, llega un goteo constante clientes. Juan Francisco Campos explica que ha consumido prácticamente la reserva de su vehículo para llenar el tanque más barato: “He apurado lo que he podido hasta hoy”. No obstante,  apunta que esta ayuda “tampoco cambia mucho la cosa”. "Antes gastaba unos 150 euros al mes en gasoil y ahora, a pesar de a la rebaja, la cuenta superará los 200", explica. 

Y es que esta opinión es la que comparte la mayoría de consumidores. Alonso Rojas, califica de positiva la medida al tiempo que indica que “podría ser un poco más la rebaja”. En este sentido, Alejandro Rodríguez señala que "algo es algo, pero no suficiente"; mientras que,  David Sánchez  "deberían hacer algo más, porque antes te costaba mucho menos".

Otros ciudadanos no estaban al tanto y han sido los trabajadores de las estaciones de servicio quienes le han comunicado la ayuda. "No sabia nada y cuando he llegado ha sido una sorpresa", reconoce Gabriel Alvarado.

Clientes como Ángel Azuaga han tenido problemas con sus tarjetas y no les han podido aplicar la rebaja: “Lamentable espectáculo, esto es un desastre”, manifiesta. Y es que en algunas estaciones de servicio han tenido que detener temporalmente su actividad al no poder acceder al sistema informático para cobrar y aplicar la rebaja. La gasolinera Cepsa, ubicada en Rincón de la Victoria, ha tenido que cerrar por este problema.

Algunos consumidores tampoco tenían claro cómo se aplicaba el descuento y ha habido muchas dudas. En la BP del polígono El Viso los trabajadores explicaban en caja una y otra vez el procedimiento y resolvían las numerosas dudas que han provocado esta primera jornada de descuento.

La rebaja de 20 céntimos por cada litro de gasolina y gasoil se aplica sobre el mismo precio del combustible, por lo que el precio que paga el consumidor aparece reflejado en el surtidor mientras se llena el deposito de carburante. El cliente, salvo que se produzca algún incidente, no tendrá que hacer ningún tipo de gestión extra para beneficiarse de la rebaja.

El descuento aplicado aparece en el ticket de compra -donde los consumidores pueden comprobar si se les ha aplicado la bonificación-, lo que está llevando lugar a confusiones, ya que muchos clientes esperan que el descuento aparezca en los paneles informativos. "Es un engaño y una estafa", expresaba María Díaz mientras observaba el monolito de una la gasolinera Galp ubicada en la Avenida Washington. Tras conocer el procedimiento, Díaz insistía en que, igualmente, no está de acuerdo con la ayuda y, a su juicio, la solución hubiera sido rebajar el IVA. Una medida reclamada también por las patronales de las estaciones de servicios

La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) también ha alertado de la "dramática situación" a la que se enfrentan las estaciones de servicio si no llegan los anticipos pronto.

En un comunicado publicado este viernes, la patronal ha advertido de la "indiferencia e inoperancia de la Administración (con respecto a los procedimientos de las bonificaciones), que condena a la quiebra a miles de estaciones de servicio". La CEOE se alinea así con el mensaje trasladado ayer por la Confederación Española de Empresarios de Estaciones de Servicios (Ceees), que forma parte de la patronal, y ha lamentado el desconocimiento por parte del Ejecutivo de los procedimientos de abono a la hora de diseñar este descuento, que en su opinión supone "la asfixia financiera" para muchas empresas.

Las bonificaciones de 20 céntimos por litro de combustible se enmarcan en el Plan de Choque elaborado por el Gobierno para hacer frente a los efectos de la guerra en Ucrania en la economía española.