Locura por los precios bajos

Ni el final de mes ni la crisis fueron ayer un impedimento para que la apertura de la primera tienda de la cadena de moda irlandesa Primark en la provincia fuera todo un éxito. La avalancha de personas cuando a las 12:00 se abrieron las puertas del nuevo espacio comercial daba cuenta de la aceptación de esta apuesta textil, con una imagen que se asemejaba más a unas rebajas con grandes descuentos que a una inauguración; gente corriendo por los pasillos como si ya tuviera escogidas las prendas, aunque fuera ayer el primer contacto con ellas, y con los probadores vacíos; todo eran compras.

Movidos por el conocimiento previo de la marca a través de visitas a lugares como Londres y con escapadas varias a Algeciras para hacerse con ropa Primark, los primeros compradores esperaban a las puertas del establecimiento desde antes de que abrieran incluso el centro comercial a las 10:00. También ayudó el rumor, desmentido por la empresa antes de la apertura oficial, de que la mayoría de los productos tendrían un precio que rondaría los 3 euros.

Las hermanas María y Fuensanta Leal se plantaron en la puerta del Larios a la 9:00 y en cuanto abrieron el centro comercial eran las primeras a las puertas de la entrada de la planta alta de Primark (la franquicia ha adquirido un local de doble planta que ocupa casi 4.000 metros cuadrados). Como todos los que estaban allí, esperaban desde hace tiempo la apertura de este espacio de moda y conocían el día y la hora exacta de la inauguración. Y aunque estaban encantadas con su apertura, se mostraban decepcionadas cada vez que el movimiento de puertas dejaba ver que los precios no eran de "1, 2 y 3 euros; es los que nos habían dicho", comentaban.

Los responsables explicaron que siempre tienen buenos descuentos y por eso no aplican otros mayores para inauguraciones; aunque eran conscientes del bulo que se había creado y alimentado a través de internet y con ayuda de las redes sociales. Aún sin el descuento esperado, lo que sí se llevaron los primeros 5.000 clientes fue una bolsa de tela de la franquicia. El nuevo espacio inaugurado ayer responde, además, a un nuevo modelo de tienda que se irá implantando en los más de 200 establecimientos de moda que Primark tiene repartidos por el mundo. Con moda de mujer, hombre, niño y bebé, su apuesta es diferenciarse de competidores directos como Inditex (Zara). Para ello, "analizamos las pasarelas, tendencias de moda, mercadillos y hasta los blogs, para adaptar los productos lo máximo posible a cada una de las zonas en las que estamos presentes", explica María Olaso, que forma parte del equipo de compradoras internacional de Primark. La franquicia apuesta por el concepto de compradores en lugar de diseñadores porque una misma persona se encarga de todo el proceso del producto, desde la forma y el diseño hasta de la etiqueta y los últimos retoques y detalles.

Cada día llegan nuevos productos y la tienda se renueva constantemente para ofrecer productos diferentes. Además, están las colecciones limit edition, con un número limitado de diseños especiales. Por eso, Mar Morón, otra de las llamadas compradoras, hacía una única recomendación: "Si ves algo que te gusta, llévatelo, mañana puede no estar".

La de Málaga es la tercera tienda que Primark abre en tierras andaluzas y la número 21 a nivel nacional. Su apertura en el centro comercial Larios supone también un empuje a la actividad de esta superficie, algo deteriorada en los últimos meses por los cierres de importantes cadenas y de los multicines. En total, la apertura de Primark ha supuesto un puesto de trabajo para 196 personas, un alto número de empleados, de los que la mitad comienzan la actividad con un contrato indefinido.