Málaga sigue su particular cuenta atrás para poder organizar entre junio y agosto de 2027 una Expo Internacional vinculada a la sostenibilidad ambiental. Con la esperanza de que el Gobierno central haga suya la candidatura de la capital de la Costa del Sol, paso indispensable para mantener viva la iniciativa, el Ayuntamiento ha mostrado este lunes sobre el terreno las líneas generales de la iniciativa al secretario general de la Oficina Internacional de Exposciones (BIE), Dimitri Kerkentzes, quien ha ensalzado la fortaleza de la misma.

"Málaga tiene una candidatura muy fuerte para 2027", ha expuesto el responsable del organismo que en última instancia tomará la decisión sobre la ciudad que acogerá la expo internacional de 2027. La visita realizada a la urbe ha incluido un recorrido por los terrenos sobre los que se prevé la actuación, en la zona de El Tarajal, así como una reunión explicativa en la que ha podido comprobar el apoyo que tanto la Junta de Andalucía como la Diputación provincial, así como la Cámara de Comercio y la Confederación de Empresarios de Málaga (CEM), dan a esta iniciativa.

Al encuentro han asistido también el actual subdelegado del Gobierno en funciones, así como representantes de los grupos municipales del PSOE y Adelante Málaga, justamente las dos formaciones que integran el Ejecutivo de la Nación. No obstante, el propio alcalde, Francisco de la Torre, ha destacado la necesidad de retomar los contactos y las negociaciones con el Gobierno con el fin de que haga suya la candidatura de Málaga.

El BIE destaca que se trata de una actuación que no requeriría de grandes inversiones en infraestructuras

Un elemento sustancial, dado que el procedimiento reglado hace que sean los países los que propongan ciudades para la organización de una expo. "La disponibilidad es buena", ha dicho el regidor en relación a la Administración central, añadiendo: "No es optimismo exagerado, es realismo...".

En la rueda de prensa posterior a estas reuniones, Kerkentzes ha puesto en valor la potencialidad de la oferta de la capital malagueña, incidiendo como elementos positivo que se trata de una intervención que no requeriría de grandes inversiones en materia de infraestructuras, las buenas comunicaciones existentes, así como la previsión de dar uso futuro a los espacios delimitados para este evento.

Vista de los terrenos elegidos por el Ayuntamiento de Málaga para la Expo 2027.

Sobre ello, el alcalde ha hablado de la ampliación de una carretera procedente de Campanillas y la búsqueda de una solución de transporte público desde la última parada del Metro en la Universidad, descartando la posible prolongación del ferrocarril urbano. Y a pesar de que no ha querido entrar en las cuestiones económicas, sí parece que la operación de urbanización y edificación de las instalaciones necesarias se irá por encima de los 50 millones.

De acuerdo con las explicaciones del regidor, a las 25 hectáreas de suelo que se exigen para una expo internacional hay que sumar otros dos espacios de 34 y 17 hectáreas, respectivamente, para albergar actividades logísticas y viviendas (1.400). Una de las particularidades de la zona elegida es que es propiedad del Gobierno, asunto que es objeto de conversaciones desde hace meses. Una de las opciones puestas sobre la mesa por el Ayuntamiento es la de obtener las parcelas a cambio de terrenos de VPO en el sector Universidad para que el Ejecutivo pueda desarrollar entre 400 y 500 viviendas.

El responsable de la BIE ha puesto en valor el avance de los trabajos por parte del Ayuntamiento. "Estamos deseando una candidatura fuerte", ha expresado, al tiempo que ha destacado el aval que la actuación tiene de las instituciones. Preguntado por el interés de otros países para proponer candidaturas, ha admitido que hay dos ciudades en Estados Unidos que podrían dar el paso. Aunque habrá que esperar a los próximos meses para que se concreten las alternativas reales, toda vez que las propuestas no pueden formalizarse hasta seis años antes del evento.

A pesar de ello, ha confirmado que, tras la visita a la ciudad, es evidente "la idea sólida" que tiene Málaga en su proyecto. Incluso, ha apuntado que el clima de la urbe puede jugar un papel fundamental en la decisión que finalmente adopten los países miembros del ente.

De la Torre, que viene haciendo bandera de este proyecto desde hace años, cuenta de inicio con el apoyo claro de la Junta. Así lo ha expresado el consejero de Presidencia, el malagueño Elías Bendodo. "Es una gran oportunidad para Málaga, Andalucía y España; confirmamos nuestro firme y total apoyo para que Málaga presente en 2021 su candidatura", ha afirmado, al tiempo que ha indicado que un evento de esta naturaleza permitiría potenciar más aún la visibilidad internacional de la capital de la Costa del Sol.

En una línea parecida se ha pronunciado Margarita del Cid, vicepresidenta de la Diputación. “La Málaga institucional pero también la productiva están aquí para apoyar este proyecto que debe servir para seguir transformando la ciudad; tenemos todo lo que hay que tener para que sea un éxito”, ha afirmado.

Tras la presencia del BIE en Málaga, corresponde al Ayuntamiento avanzar en la vía de negociación con el Gobierno. Si finalmente el Ejecutivo liderado por Pedro Sánchez apoya la propuesta, deberá formalizar la candidatura antes de junio del año que viene. Un paso que abrirá un posterior proceso de competencia con otras ciudades aspirantes y un análisis técnico más profundo por parte del ente internacional.