Málaga quiere parecerse en muchas cosas a las grandes ciudades, pero la presencia de ratas en las inmediaciones de la Torre Eiffel no es exactamente uno de los espejos en los que quiere mirarse el consistorio malagueño. Es por eso que en la Comisión de Pleno del Ayuntamiento se ha aprobado una moción propuesta por el grupo municipal socialista para "incrementar operarios y mejorar la labor de desratificación de la ciudad de Málaga". 

Pero, en esto de la lucha contra la proliferación de los roedores y otros insectos que puedan generar insalubridad, la bancada de la oposición y la del equipo de gobierno han vuelto a encontrar ciertas discrepancias. Por el equipo socialista, Begoña Medina ha recriminado que los medios no venían siendo los suficientes para poner pie en pared a esta situación, avisando de que "el pasado mes de mayo ya señalamos la necesidad de mejorar estos planes ante la llegada del calor". 

Por su parte, Francisco Cantos, concejal de Sostenibilidad del Ayuntamiento, ha señalado que las denuncias oficiales, "más allá de las percepciones personales que todos conocemos, vienen reduciéndose, siendo este año menores que en 2019". Además, ha señalado a los vecinos como posible parte del problema, al asegurar que los tratamientos para la desratificación son menos eficaces si las ratas "encuentran comida, porque entonces no van al cebo, van a la comida fácil", señalando la actitud incívica de ciertos vecinos, "muchas mañanas los parques amanecen llenos de basura, incluso encontramos restos justo al lado de las papeleras". 

Ha tomado la voz un portavoz vecinal de la zona de Alameda Alta, acusando la presencia de estos roedores en las intermediaciones de un parque y una plaza pública, "las ratas campan a sus anchas, los niños incluso juegan con ellas". El PSOE asegura haber contado al menos medio centenar en una visita previa. A este vecino, la concejala de Servicios Operativos, Teresa Porras, le ha pedido que "una de las vecinas no eche pan de comer a las palomas, que ambos conocemos la situación", asegurando que otra residente de la zona les había hecho llegar quejas de estos comportamientos que atraerían este tipo de fauna al lugar. 

"Cuando vivimos en una sociedad que tiene cuatro ratas por cada diez habitantes, todo recurso invertido es poco y el Ayuntamiento de Málaga puede hacer más y mejor para evitar las enfermedades que contagian los roedores a la población", ha señalado Medina, criticando que sólo "hay dos personas respondiendo al teléfono de quejas, no hay más denuncias oficiales porque no cogen le teléfono". 

Al respecto Cantos ha señalado que se puede hacer uso del teléfono 900 900 000 de manera que los operarios de limpieza busquen una solución "en 24 o 48 horas". Además, ha señalado que a veces la presencia de ratas a la vista es consecuencia de que el producto que han utilizado por su exterminio ha funcionado, "porque se desorientan y salen a la luz".