El Ayuntamiento de Málaga, por medio de la Comisión de Ordenación del Territorio, ha sacado adelante el convenio para implantar una superficie comercial en la parcela de la antigua fábrica de ladrillos Salyt, en la avenida Valle-Inclán. El mismo supondría la creación de unos 350 puestos de trabajo y la inversión de 40 millones de euros por parte de Ediffisa, la empresa que impulsa este proyecto. 

Este supone la implantación de una zona comercial de 21.000 metros cuadrados –menos de la mitad de los 58.000 que ocupa la parcela y los 50.000 que sería el máximo permitido–. Al convenio se han opuesto las formaciones de la oposición, el Partido Socialista y Unidas Podemos.

Mariano Ruiz Araujo, concejal del PSOE, ha asegurado que de los 50.000 metros cuadrados "el Ayuntamiento va a sacar muy poco", además de señalar hacia la oposición vecinal "a los que se le habían prometido otros proyectos". Además de señalar que el proyecto es "una muestra más del urbanismo a la carta que sólo sirve a intereses espurios".

Remedios Ramos, concejala de Unidas Podemos, ha propuesto que en la parcela se repartan los usos por tercios, siendo un tercio para zonas verdes, otro para equipamiento –en el que ha pedido un fin deportivo y la construcción de una piscina cubierta– y un tercero para uso comercial. Considerando que no se conserva el mínimo "de patrimonio y que Málaga necesita espacios de esparcimiento y para la ciudadanía". 

El concejal de Urbanismo y Ordenación del Territorio, Raúl López, ha aclarado que el convenio no pretende implantar un centro comercial, sino "unidades comerciales que dinamicen el barrio". Además, ha tachado el acuerdo como "una gran noticia para la ciudad", que ve cómo se da uso a una parcela que lleva parada desde 2009.

El proyecto incluye varios ramales en el entorno de la parcela desde la Avenida Valle-Inclán, "que mejorará la permeabilidad de la zona", que se incluye en los 800 metros cuadrados que recaerían en el Ayuntamiento de Málaga. Además, ha recalcado que lo votado este lunes es "un convenio, ahora habrá habrá que tramitar una actuación de transformación urbanística que conllevará una innovación del plan general y que posibilitará todo esto en un par de años".

El convenio también recoge la mejora de los accesos desde el barrio de Carlinda, tanto para tráfico rodado como peatonalmente. Además se contemplan un millar de aparcamientos, parte de ellos bajo rasante y otros sobre superficie.