La recuperación del sector inmobiliario en España está dejando a Málaga capital en una posición inmejorable para los próximos años. El mensaje, que viene siendo expresado en los últimos meses, volvió a quedar ayer sobre la mesa en el marco de un encuentro organizado por la Asociación de Constructores y Promotores (ACP) de la provincia. Tal fue el grado de valor que se le otorga a la capital de la Costa del Sol en el actual escenario nacional que algunos expertos no dudan en verla como la plaza adecuada para que los inversores interesados en el segmento de oficinas den el salto más allá de las fronteras de los emplazamientos tradicionales de Madrid y Barcelona.

"El mercado de oficinas tiene que buscar nuevos destinos para alojar su dinero y Málaga tiene una posición envidiable. Y eso hay que aprovecharlo", enfatizó Pablo Méndez, director de la División de Inversión Savills Aguirre Newman, quien enmarcó el potencial de la capital malagueña en la situación de "incertidumbre política" que afecta a Barcelona y en el "agotamiento" que se produce en Madrid, donde los índices de rentabilidad han caído a "mínimos históricos", con un 3,25%. Méndez fue concluyente en este sentido al afirmar que si se trasladasen esos parámetros a la zona prime de Málaga la rentabilidad crecería hasta el 5%. "De cara a un inversor con situación consolidada en Madrid los activos de gran calidad en Málaga ofrecen una rentabilidad de más de 150 puntos", indicó.

Los datos manejados por Savills Aguirre Newman sitúan el stock actual de espacio terciario en la capital en 600.000 metros cuadrados, buena parte de ellos en el Parque Tecnológico de Andalucía (PTA). Y unos niveles de ocupación del 90% en la zona Centro y entorno más próximo. Justo los emplazamientos en los que, señaló, quieren asentarse los clientes interesados. "Necesitamos más suelo ahí porque es la zona donde quieren trabajar los inquilinos", expuso el responsable de la consultora, que situó los precios de arrendamiento en unos 12 euros, "que es la media nacional", y con máximos de 18 euros.

Una horquilla que, a su juicio, hace atractiva la posibilidad de invertir en este sector. "Necesitamos por los menos 14 euros de media el metro cuadrado; es cuando se le ve sentido hacer oficinas y ese es el punto en el que se encuentra la ciudad", insistió.

Para Méndez, las oportunidades de Málaga pasan por crear nuevos desarrollos. "La sensación que tenemos cuando venimos con inversores es que no hay suelo preparado", dijo, apuntando de manera directa a zonas con potencial como La Térmica, Martiricos... "Me gustaría tener las oficinas mirando al mar; cualquier desarrollo de este tipo seguro que tendrá demanda", insistió.

"El mejor arma de Málaga es su nombre", afirmó el director de la División de Inversión Savills Aguirre Newman, quien subrayó la necesidad de que "dentro del crecimiento que está teniendo la ciudad, se regenere el parque de oficinas, que es lo que consolida destino. Y eso debe explotarlo Málaga".

Juan Velayos, consejero delegado de Neinor Homes, abundó en el potencial del territorio Málaga. "Estamos enamorados de Málaga, están haciendo las cosas de manera significativamente mejor", expuso, valorando el funcionamiento de la Administración local frente a lo que sucede en otros espacios del país, en los que "todo lo de las licencias es un drama".

"Málaga tiene una oportunidad, por tener mayor certidumbre que en otras zonas, con lo que a los inversores nos encanta; como se despiste alguna otra ciudad la va a pasar por la derecha y la izquierda", apostilló. Las previsiones de Neinor, uno de los nuevos actores protagonistas del sector, elevan las ventas programadas en los próximos años a 850 millones de euros, de las cuales el 60% se localizan en la Costa y el 40% restante en la capital.

Otro de los participantes fue el director comercial de Tinsa, Pedro Soria, quien puso en valor el "crecimiento moderado" que tienen los precios del residencial en la capital de la Costa de Sol, con un 5% el año pasado. De acuerdo con los datos de la empresa de tasación, la capital ha pasado en la última década de un valor medio por metro cuadrado de 2.415 euros, en el segundo trimestre de 2008, a los 1.444 euros el metro cuadrado a finales de pasado ejercicio, con una caída del 40%.

Por el contrario, se observa una recuperación del 19% al comparar el final de 2017 con el cuatro trimestre de 2013, que es cuando se contabilizó el pico mínimo de los precios, de 1.207 euros el metro cuadrado. La previsión de Tinsa es que la evolución siga siendo positiva pero en términos moderados. El tiempo medio que se tarda en vender una vivienda en Málaga es de 7,4 meses.

Por su parte, Daniel Caballero, director de Negocio Inmobiliario de CaixaBank, apuntó que en los últimos años la entidad ha pasado de financiar entre 200 y 500 viviendas a rondar el millar de inmuebles.